Intervención de Subirachs

Especial ARCO 2014

Los escaparates de El Corte Inglés son uno de los primeros espacios de exposición pop-up, ventanas que ofrecen de manera puntual intervenciones de artistas durante unos días concretos. Coincidiendo con ARCO, la historia se repite.

El 6 de marzo de 1965 fue un día convulso en el centro de Barcelona. Era sábado y una jornada de manifestaciones en casi todas las universidades España. Así llevaban toda la semana. A pocos metros, en Plaza Cataluña, el sentimiento de denuncia se colaba en los escaparates de El Corte Inglés en forma de exposición temporal. Lo que ahora se conoce como espacios pop-up. Las intervenciones eran de Juan José Tharrats, Joan Hernández Pijuan, Albert Ràfols Casamada, Juan José Tharrats, Josep Maria Subirachs, Josep Guinovart y Francesc Todó.



Mucho de ellos formaban parte del colectivo Estampa Popular, que nació a mediados de los 60 como una manera de superar modelos expresionistas, bajo una vuelta a la figuración que entre algunos artistas alcanzó un fuerte cariz social y un contundente crítica contra el franquismo. También en 1965 tuvieron su primera exposición como movimiento, en la galería Belarte de Barcelona, mientras otros colectivos trabajaban en paralelo en Madrid, Andalucía el País Vasco y Valencia. De Estampa Popular valenciana nació, de hecho, Equipo Crónica.



Esta semana, del miércoles hasta el domingo, y casi 50 años después, los escaparates de El Corte Inglés de Callao, en el centro de Madrid, revisan la historia recuperando las intervenciones de aquel 1965 de denuncia. De nuevo es una idea del comisario Alfonso de la Torre, que ha titulado esta nueva exposición Pre-Pop. Barcelona, 1965, dentro del programa de actividades afterARCO y promovido por El Corte Inglés-Ámbito Cultural. Pre-Pop porque algunos de los artistas tantearon con los presupuestos del conocido movimiento, como Guinovart, incorporando ensamblajes neo-dadaístas y materiales diversos: desde ventanas a trozos de mecedora. Aunque la necesidad de denuncia le llevaba a homenajear a aquellos personajes que se habían convertido en símbolos vivos de la lucha por la libertad, como Picasso o Che Guevara. El objetivo de todos ellos era hacer llegar el arte contemporáneo a todo el mundo, superar la dificultad intrínseca que le define. También lo es de propuestas como estas, a pie de calle.