Fachada del Centro García Lorca en Granada, custodiado por Ferrovial
"Para los barcos de vela, Sevilla tiene un camino; por el agua de Granada sólo reman los suspiros", decía Lorca en su Romancero gitano. Muchos se han lanzado desde 2005, cuando se hizo pública la idea de abrir allí en la ciudad andaluza un centro dedicado al poeta. Aunque parece un proyecto abocado al fracaso. Ya van diez años de retraso, crisis y desencuentros entre las instituciones mediantes. Siempre hay un "ajuste de última hora", dicen, que retrasa la apertura. La última en quedarse colgada fue la prevista para el pasado 5 de junio, que dejó colgados varios conciertos, espectáculos de danza y teatro, talleres literarios así como la exposición El público, en homenaje a Lorca, en la que diez artistas habían hecho obra nueva, producida específicamente para la exposición, todavía pendiente de pago.El motivo de este último desencuentro parece firmarlo la constructora del edificio, Ferrovial, que reclama una deuda de 3 millones de euros al consorcio promotor. Eso es: Ministerio de Cultura, Consejería andaluza de Cultura, Ayuntamiento y Diputación de Granada y la propia Fundación García Lorca. Ante la deuda, Ferrovial bloqueó la apertura del centro a pocos días de su inauguración.
Es la explicación "lógica" de esta crisis, aunque hay una historia oculta que mucho tiene que ver con la actual incertidumbre política. Parece ser que Ferrovial es la primera empresa del Ibex-35 condicionada por el resultado deparado por las urnas del 24M. Aunque eran conscientes de esa deuda mientras se tramitaban todos los preparativos de la inauguración, no fue hasta después de la consulta electoral cuando Ferrovial comunicó que no emitiría la certificación definitiva de la obra. La compañía no hace comentarios al respecto, pero el hecho de que no haya una composición definitiva de gobiernos parece ser crucial. Unos desajustes políticos que no son nuevos: "el nuevo Centro Lorca estará terminado en 2009" (2007); "el Centro García Lorca encalla por disputas institucionales" (2010); "las desavenencias financieras entre Cultura y la Junta alargan la demora" (2013); "el Centro García Lorca y la historia del nunca acabar" (2014)... La propia Laura García Lorca explicaba en 2011 a El Cultural que no había dinero para acabar las obras.
¿El responsable? El secretario de la Fundación
Pero hay más. El último paso de esta crisis es la denuncia que ha interpuesto Laura García Lorca al secretario de la fundación, Juan Tomás Martín, por falsedad documental, apropiación indebida y administración desleal. El agujero económico, más allá de los 3 millones de euros que reclama Ferrovial, según confirma la Fundación García Lorca, ronda los 12 millones de euros pendientes de pagar o justificar. Tienen que ver con ayudas concedidas para la construcción del inmueble, pero que se ha justificado con facturas de créditos bancarios, viajes, sueldos, exposiciones y producciones de teatro ajenas a las obras de edificio. Parece ser que las explicaciones de Tomás Martín al respecto ("es una cuestión de interpretación de gastos", según ha dicho) no convencen a nadie.Entre la deuda de la Fundación García Lorca está el pagar 8,7 millones de euros al Ministerio (que reclama 1,7M€ por facturas que ha rechazado), a Ferrovial (los 3M€ ya citados) y a La Caixa (4M€ que la Fundación solicitó como adelanto a cuenta de la futura recepción de los fondos Feder de Noruega). Fondos, por otra parte, que Noruega advierte no abonar si el edifico no abre en fechas previstas. El resto de deuda de la Fundación, algo más de 4M€ hasta llegar a esos 12M€, son cuentas pendientes de justificar a Cultura y a la Junta de Andalucía.
Por su parte, Laura García Lorca no quiere hacer comentarios hasta que no tengan la auditoría terminada con todos los datos contrastados. De hecho, para hoy ha convocado dos reuniones: una de la fundación para aclarar sus cuentas y otra posterior en el Ministerio con todo el consorcio. Todo apunta a un caso de malversación de fondos públicos.
Esta deriva del Centro García Lorca dista mucho del deseo inicial de su impulsora, la sobrina del poeta. Las líneas principales se remontan a 2006. Sería un centro que tuviera la misión de custodiar y abrir a la investigación los fondos del poeta que actualmente conserva la Residencia de Estudiantes en Madrid. Así, Granada recuperaría la biblioteca personal de Lorca, con más de 4.600 libros catalogados, su colección de revistas literarias, su correspondencia, dibujos originales del poeta, su fondo fotográfico y más de 300 obras coleccionadas por él y la familia.
@bea_espejo