Picasso Sucks de Roberta Marrero en La Fiambrera

La feria, una plataforma de difusión y proyección de arte emergente con el compromiso de llegar a diferentes públicos, abre sus puertas hasta el próximo 28 de febrero en el COAM. 50 expositores, nacionales e internacionales, muestran obras de diferentes disciplinas como el arte sonoro, electrónico e, incluso, gastronómico. Pero si hay una clara protagonista esa es la pintura.

La pintura está de moda. Sí. Contra todo lo que se dice en el panorama artístico, JustMad verifica que esta práctica sigue viva. La feria, que cumple siete años, se realiza en el edificio del COAM, en el centro de la ciudad, entre los barrios de Chueca y Malasaña con la idea de "ser una feria de arte urbano", comenta Gregorio Cámara, director de la cita. Este año participan 50 expositores y siete revistas y editoriales que presentan arte emergente, electrónico y sonoro. También pintura. Y también arte grastronómico. Todo cabe en un modelo ferial diferente que quiere ser más accesible a todos los públicos.



Su director destaca la presencia de la pintura en clave clásica y tradicional. "La idea es hacer barrio y cultura", prosigue, antes de empezar el recorrido desde la tercera planta en la que una escultura de Hector Francesch hecha de 3000 pajitas nos da la bienvenida. JustMad es, pues, una plataforma de difusión y proyección de arte emergente con el compromiso de llegar a diferentes públicos. De las 50 galerías que están presentes 42 forman parte del programa general y 14 son madrileñas haciendo que esto "ayude a movilizar el tráfico artístico en la ciudad".



Como un río de Pepe Carrió en la galería Blanca Berlín y, a la derecha, Sin título de Rafa Macarrón en Escalera

El paseo comienza con las artistas Gabriella Bettini en la Galería Silvestre, Sara Sáenz en Plastic Murs o el arte urbano y llamativo de Sr X y Julio Rey en la Galería Viki Blanco. "Son piezas que bien podrían estar en las paredes de la calle" dice Cámara al respecto. Aunque, tal vez, una de las piezas más llamativas pertenece a esa práctica llamada gastroperformance. Una escultura hecha de algodón y de algodón de azúcar. No es rosa es en este caso sino gris y un cartel que dice Try me invita a que el público se pruebe la escultura. Pero no es la única pieza de este carácter, Hernán Barrios estará en JustMad con su obra Populus Corpus, unos papeles comestibles con mensajes escritos en tinta. También estará Simone Mattar, alumna de Ferrán Adriá, explicando en qué consiste esta disciplina.



Poco después nos encontramos con el programa Just Residence en el que han participado ocho artistas internacionales. Todos ellos han convivido en Málaga durante cuatro semanas "para conocer el entorno y ver cómo eso afecta a la práctica artística", comenta el director. Al lado, otra selección de artistas jóvenes. En este caso estudiantes de la Facultad de Bellas Artes escogidos por un jurado del que formaban parte el artista Miki Leal y el propio Gregorio Cámara. Este año han sido 14 los jóvenes que expondrán sus propuestas en turnos de tres por día. Un stand vivo.



Sin título de Luis vasallo en Espacio Valverde

En la segunda planta encontramos galerías como Área 72 desde la que buscan "artistas que tienen ideas bien definidas, no de perfección matemática pero sí de acabado". Guillermo Ross, por ejemplo, es uno de sus protagonistas que expone esculturas de mármol de Teruel. "Las talla por un lado y las deja partidas por el otro simulando el policromado de la naturaleza". O Mr Pink, galería que expone fotografía intervenida por los propios artistas que han reflejado "un lugar que les ha causado impacto ya sea porque de pequeños lo frecuentaban o tienen un significado especial para ellos", apunta María Tinoco. Otras de las curiosidades de la sala son los dibujos hechos con plastilina del artista Rafael Jiménez en la galería Modus Operandi.



Y si la sección Just Residence se encontraba arriba, en esta planta las galerías que están detrás de los artistas se encuentran aquí. "En el stand de arriba no podemos exponer todas las obras y que hayan venido hasta aquí es un esfuerzo para ellos", comenta Cámara. Y a su lado, otra de las secciones de la feria, Just México City, con galerías como Efectos Especiales y Atea que traen a Madrid el testimonio de la amplitud artística mexicana. "Lograr sobrevivir y buscar soluciones a todo puede venir derivado de los complicada y caótica que es su capital", apunta el director de la cita.



Obra de Beatriz Dubois en la galería Up&Coming y, a la derecha, Optichromie 12 de Felipe Pantone en IAM Gallery

Ya en la planta baja de la escuela de arquitectos protagonizan los stands artistas como Avelino Salas y una pintura de Alfonso Fernández que muestra problemas muy actuales como el de los refugiados sirios pero "desde unos tratados tradicionales de la pintura". Y Rafael Canogar que dialoga con artistas más jóvenes justo antes de entrar en la sala del arte tecnológico. Allí, instalaciones, proyecciones e incluso un vestido del estudio IED360 que vistiendo unas gafas de realidad virtual trasladan al público a un desfile.



Ya lo dijo Picasso: "Todo lo que puede ser imaginado puede es real".



@scamarzana