Haris Epaminonda. Foto: Guillermo Mendo
Es una de las artistas más queridas del panorama internacional, hermética y sugerente como su nombre, y minuciosa y sutil como las obras que vemos en el CAAC de Sevilla, donde expone su primera individual en nuestro país. Antes de esta cita, apenas habíamos visto trabajos suyos aquí. Tan sólo su vídeo Tarahi II (2006), dentro del Festival LOOP del año pasado, donde Haris Epaminonda (Nicosia, 1980) manipulaba planos de televisión cogidos de una habitación de hotel duranet su entrada en Egipto. Había un buen cóctel de sensaciones: primeros planos a cámara lenta de una famosa actriz egípcia se alternaban con la imagen de dos gemelos al ritmo de la conocida melodía de I saw Daddy Today de Yann Tiersen.Precisamente ese halo nostálgico y esa desubicación es uno de puntos en los que trabaja la artista. Para ello, utiliza multiplicidad de medios, desde el collage a la instalación, de la escultura al vídeo. Son obras en que la artista omite información concreta del lugar y fecha de origen de los objetos, pues pretende que cada vez que una pieza sea observada, ésta sea reinventada y reinterpretada por el espectador. Es por ello que presenta los objetos como material en bruto que adquieren un significado cuando interfieren en la realidad o se les asocia con otros elementos en el espacio. Sus especificaciones, el color, tamaño u origen, salen a la luz entonces.
En Sevilla, paseando por las salas, dice que su trabajo está muy unido a sus orígenes, de su Chipre natal, aunque no sea obvio a priori. También tiene mucho que ver con las casualidades, "aquellas coincidencias que ocurren cuando menos las esperas pueden ser muy poderosas y mágicas, revelando lo más imperceptible", dice. Presenta su proyecto más conocido, The Infinitive Library.
Pregunta.-Háblenos de la idea de archivo de esa biblioteca que es The Infinite Library, que compone junto a Daniel G. Cramer desde 2007.
Respuesta.-La biblioteca infinita es un proyecto en curso que empezó en 2007 en colaboración con Daniel Gustav. Es fundamentalmente un archivo de libros que se expande, cada uno hecho de páginas de uno o más libros encontrados y encuadernados de nuevo. Empezamos el proyecto desarmando algunos libros y reorganizando sus páginas individuales. Una vez que las páginas de esos libros han sido reordenadas con superficies brillantes y mates, con imágenes de diferentes orígenes y hojas de diferentes tamaños, empezamos a experimentar, coleccionando libros y pensando en ellos como fragmentos de nuevos volúmenes. Cada página, sacada de su contexto y puesta en uno nuevo, forma nuevas asociaciones. El orden, el ritmo, la lógica del libro original fueron interrumpidos y reconfigurados. El título, La biblioteca infinita, está inspirado en uno de los cuentos del libro La biblioteca de Babel de Borges, en el que los bibliotecarios entran en una enorme biblioteca para buscar el significado entre los libros que ellos creen que tienen todas las respuestas, solo para encontrar volúmenes llenos de contenido irrelevante, en todas las posibles variaciones y secuencias. Pronto un catálogo online servirá de índice.
P.-¿Ese proceso de documentación fragmentario es lo que define Crónicas?
R.-Crónicas es un proyecto en curso que empezó a tomar forma en una exposición en la Site Gallery en Reino Unido en 2010. Son unas series de instalaciones audiovisuales con canales múltiples, a través de las cuales las películas se transfieren de formato Super8 a digital mientras que los varios paisajes sonoros son específicamente compuestos cada vez por la música experimental del dúo Part Wild Horses Mane On Both Sides (Kelly Jayne Jones y Pascal Nichols) asentado en Reino Unido. Es una colección de imágenes en movimiento rodadas con mi cámara super 8 durante mis viajes de investigación. Como sugiere el título, Crónicas es un proceso continuo de documentación y captura de escenas o momentos que marcan la continuidad del tiempo y de las capas de la historia presentes en lugares y cosas. Coleccionando y yuxtaponiendo estos casos y encuentros, estoy de alguna forma intentando construir conexiones abstractas entre cosas así como observar el paso del tiempo. Estudio los cambios que ocurren entre un evento y el siguiente. Veo estos trabajos semánticamente, parecido a como uno formaría frases y trata de ir más allá del concepto de los meros documentos..
P.-¿El espacio de la exposición es parte de la obra de arte?
R.-Sí, yo veo el espacio como una parte integral de la obra y la manera en la que el total de la instalación cada vez se da forma a sí misma. Para mí la esencia está igualmente en las constelaciones distintivas así como en la formación de una completa narrativa visual. Los elementos individuales y sus localizaciones específicas dentro de la exposición crean la posibilidad de múltiples lecturas, lecturas que están determinadas en parte por la perspectiva física y emocional del espectador. A lo mejor es también una cuestión de un cambio visual, o giro, en la percepción de las cosas. Ciertos motivos están repetidos, como una acumulación de gestos que resultan ser objetos o cosas que existen alrededor de nosotros en diferentes estados de desaparición.
@bea_espejo