Visitantes agolpados frente al Jardín de las delicias de El Bosco, en el Museo del Prado
En 2016, el Museo del Prado no sólo ha generado las noticias más relevantes sino que ha triunfado en el ranking de mejores exposiciones elaborado por los críticos de El Cultural: tres de sus muestras, con la popularísima dedicada a El Bosco en cabeza y otras dos, de disfrute más sosegado, en posiciones destacadas: Metapintura y George de La Tour. El museo abrió sus puertas por primera vez a una mujer artista, Clara Peeters, y se prepara (mucha calma) para ocupar, tras la remodelación de Norman Foster, el antiguo Salón de Reinos. Miguel Zugaza ha anunciado que se marcha, dejando atrás una institución rejuvenecida y con aplauso generalizado a su gestión, si bien con la sombra de unos relevos nada abiertos y transparentes, tanto aquí como en el Museo de Bellas Artes de Bilbao, su destino inmediato.¿Concursos sí o no? En 2016, entre otros, llegaron mediante ellos a sus cargos Valentín Roma (La Virreina, Barcelona), Karin Ohlenschläger (LABoral, Gijón), o Manuel Segade (CA2M, Móstoles). Pero se hizo mal en otros lugares, como la Fundació Pilar i Joan Miró de Palma o el TEA de Tenerife, donde acaban de sacar a "licitación" la dirección del festival Fotonoviembre. Ya hizo lo mismo (y se declaró desierta) el Centro de Creación Contemporánea de Andalucía en Córdoba, que se inaugura por fin y que acaba de enmendarse con un concurso abierto para dirigirlo. Se ha abierto también el Museo de la Aduana en Málaga, que es en cierta medida una subsede del Museo del Prado, con cerca de 150 obras de éste depositadas allí, mientras se eternizan las negociaciones sobre la del Reina Sofía en Santander. Éste museo ha producido dos de las mejores muestras del año, la ya histórica Campo cerrado y la segunda que organiza sobre Marcel Broodthaers; empata con el MACBA (Andrea Fraser y Antoni Miralda) y es seguido por el IVAM (Fake) y dos habituales en estas listas: la Fundación Juan March (Escuchar con los ojos) y la Fundación Miró de Barcelona (Fin de partida).
El año que viene seguramente deberemos destacar alguna de las exposiciones que conmemorarán (empiezan ya) el cuarto centenario de Murillo; en 2016 los grandes eventos han sido el quinto de la muerte de El Bosco, el tercero del nacimiento de Carlos III y, claro, la capitalidad cultural de San Sebastián, que después de tanto problema ha salido bien parada desde el punto de vista expositivo. El Museo de Arte Abstracto de Cuenca ha celebrado su medio siglo de vida con nuevos espacios y la feria ARCO sus 35 años abriendo sucursal en Lisboa. El Museo Guggenheim ha empezado ya la fiesta por su 20 aniversario (en 2017) pero ha participado este año de la situación más lamentable y polémica en el panorama museístico: las huelgas en museos de Barcelona y Bilbao por la precariedad laboral que acompaña a las subcontratas.
Nos han puesto nuevos responsables políticos en Cultura (Fernando Benzo) y Bellas Artes (Luis Lafuente), sin actividad reseñable aún. El ministerio, tras el gran parón por la ausencia de gobierno, concedió sus premios: el Nacional de Artes Plásticas a Juan Hidalgo, el de Fotografía a Isabel Muñoz, y el Velázquez a Marta Minujín.
Adioses de fin de año: se ha ido Iñaki Martínez Antelo del MARCO, Miguel Ángel Recio de AC/E y una parte de la colección Várez Fisa de España (subastada en Londres).
@ElenaVozmediano