Fachada del Ayuntamiento, donde se realiza el concurso abierto

Llega a Salamanca la segunda edición del Festival Luz y Vanguardias con artistas como el mexicano Rafael Lozano-Hemmer, la francesa Félicie d'Estienne d'Orves, el colectivo franco-japonés Nonotak Studio y los españoles José María Cruz Novillo y Juan Gomila. Durante cuatro noches sus piezas de luz se proyectarán en los edificios más representativos de la ciudad.

Salamanca volverá a llenarse de luz. Durante cuatro noches, del 15 al 18 de junio, se proyectarán sobre los edificios más emblemáticos de la ciudad obras de artistas nacionales, internacionales, empresas audiovisuales y estudiantes de los dos centros universitarios salmantinos, una de ellas, la Universidad de Salamanca, inmersa en la celebración de su VIII centenario. Y, como ya pasara hace unos días con las obras de Miquel Barceló instaladas en la Plaza Mayor o en el Patio de Escuelas Menores, con motivo de la segunda edición del Festival Luz y Vanguardias, el arte llega a la Casa de las Conchas, el Ayuntamiento, la Catedral Nueva o la Plaza de Anaya.



Organizado por el Ayuntamiento de Salamanca y con el apoyo de Iberdrola, este año el festival añade una sección más a las tres de su primera edición. De este modo, al programa central que invita a los artistas a intervenir en las distintas localizaciones, se unen el concurso abierto; las propuestas de los jóvenes creadores y la novedosa sección +Luz. "En esta edición el trabajo que se presenta es más estructural en relación con los edificios, ya que la edición pasada se basó en la naturaleza. Todos los trabajos de vídeo y luz son específicos para cada espacio", explica la responsable artística Lourdes Fernández, directora de La Alhóndiga de Bilbao.



En la edición de este año participan nombres tan importantes como Rafael Lozano-Hemmer, principal exponente mexicano de arte electrónico; Félicie d'Estienne d'Orves, artista que combina la luz y la escultura, y NONOTAK Studio, una colaboración entre la ilustradora francesa Noemi Schipfer y el arquitecto y músico japonés Takami Nakamoto, que crean instalaciones audiovisuales y les dan vida realizando una performance. José María Cruz Novillo, artista con más de cincuenta años de trayectoria profesional, y Juan Gomila, uno de los artistas referenciales en el panorama español posterior al desarrollo del arte Pop, son las apuestas nacionales.



+Luz es la novedad de este año: una programación paralela, en su mayoría diurna, y presentada por cinco espacios artísticos de Salamanca. El centro de arte DA2 presentará una exposición de luz y fotografía, Espacio- Tiempo; la galería Adora Calvo, expondrá al artista Javier Riera, que desarrollará un proyecto donde combinará cuadros, fotografía o vídeo con intervenciones de luz y oscuridad, en la línea de sus últimos trabajos; Espacio Nuca presentará Constelaciones, con la obra en cerámica de la diseñadora y artista madrileña Julieta Álvarez; Casa Lis estrenará nueva iluminación de su espectacular fachada sur; y, por último, La Salchichería presentará Trilogía de la luz de la artista Juana Ciudad, un ciclo nocturno de música electrónica e interacción lumínica y "no luz", con cenas y maridajes a oscuras que potencian los sentidos.



Además, sobre la fachada del Ayuntamiento, en la Plaza Mayor, tendrá lugar el concurso abierto. Proyecciones de artistas independientes, colectivos y empresas dedicadas a la creación audiovisual y al videomapping competirán por el premio del jurado. Por otro lado, sobre la fachada de la Casa de las Conchas, estudiantes de la Universidad de Salamanca y de la Universidad Pontificia de Salamanca tendrán la oportunidad de mostrar sus trabajos.



"Este año, los artistas invitados aportarán una interesante variedad de visiones aunque con un punto en común, la concepción del espectador como parte fundamental de sus obras. Son creadores muy solicitados en el circuito internacional pero Salamanca se ha hecho ya un hueco en el panorama artístico de la luz y para ellos resulta muy atractivo presentar sus obras en este escenario Patrimonio de la Humanidad", añade Lourdes Fernández.