Los retratos de los marqueses en su lugar de origen

Con motivo del 25 aniversario de la Casa de América los dos retratos de los marqueses, realizados por Franciso Pradilla y Ortiz hacia 1888, regresan 80 años después al lugar para el que fueron realizados.

80 años. Eso es lo que han tardado en volver a su lugar de origen. Para poner fin a un largo exilio fuera de casa el Museo del Prado cede, en un préstamo temporal de cinco años renovables, los dos retratos de los marqueses de Linares a la Casa de América, lugar para el que fueron concebidos, con motivo del 25 aniversario de la institución en el Palacio de Linares de Madrid. Leyendas aparte, los dos marqueses retratados hacia 1888 por Francisco Pradilla y Ortiz vuelven a ocupar el lugar para el fueron pensados originalmente.



Javier Barón, jefe del área de Conservación de pintura del Siglo XIX del Museo del Prado, mantiene una estrecha relación con los retratos de José María de Murga y Reolid y Raimunda Ossorio y Ortega. Se cree que los retratos salieron de allí hacia 1940 cuando esta dejó de ser utilizada como residencia privada. En 1958 ambos lienzos salen a Venezuela para retornar finalmente a Madrid en el año 1992 con motivo de ser expuestos en el Museo del Romanticismo. Más tarde, pero en esa misma época, fueron retenidas en el aeropuerto de Barajas bajo un expediente de abandono, lo cual significa que no tienen dueño. Años más tarde, en 2004, llegaron al Museo del Prado para ser conservados y restaurados por sus expertos. Tras una temporada en los almacenes de la pinacoteca el año pasado, con motivo de la organización del 25 aniversario de la Casa de América, el propio Barón propuso que volvieran al Palacio de Linares. "Se trata de una oportunidad poder recuperar los cuadros para su lugar", comenta el conservador. "Fueron realizados para este lugar y mejor que aquí no se van a ver en ninguna parte", amplía.



"Pradilla realizó estos retratos cuando toda la decoración del Palacio ya estaba hecha y los marqueses pensaron que ellos mismos tenían que estar presentes". El pintor configuró las obras cuando vivía su época de esplendor en Roma, "donde vivían todos los artistas renombrados", recuerda Barón. "En ellos se ven las indumentarias de la época como el frac y el sombrero de ópera que reposa en la silla, en el caso del marqués, que es retratado en la biblioteca, y las joyas y el pañuelo tradicional del Siglo de Oro en el caso de ella, retratada en la escalera de mármol", detalla. Además, al fondo se ven los escudos y la capa de terciopelo con sus colores y elegancia.







Quien conoce bien el contexto de los marqueses y su residencia es María Álvarez-Garcillán, restauradora del Museo del Prado y una de las encargadas de llevar a cabo el proyecto de remodelación del Palacio para que Casa de América pudiera abrir sus puertas hace ahora 25 años. "Había que luchar no solo con las leyendas del lugar sino con 75 años de abandono de un edificio que se mantuvo sin mantenimiento y acechado por las humedades", recuerda. Debido a la superficie porosa de la piedra de la fachada "la erosión hizo que algunos trozos se desprendieran y la humedad afectó también al interior". Incluso algunos lienzos de las paredes se desprendieron y tuvieron que ser restaurados. "En el proyecto estuvieron representadas todas las especialidades con más de 100 restauradores", apunta Álvarez-Garcillán. Uno de los retos del proyecto, señala, fue tener que llevar a cabo toda la modernización del Palacio en un tiempo de 16 meses, añadiendo el cableado en todas las salas de un edificio que era moderno para su época pero que tan solo contaba con electricidad para el timbre y algún teléfono interno. Ahora, "25 años después tenemos un palacio bien mantenido", asegura la restauradora.



No está de más recordar que el edificio, en pleno centro de la ciudad con vistas a la plaza de Cibeles y al actual Ayuntamiento de Madrid, estuvo a punto de ser demolido pero un funcionario consiguió la paralización de tal suceso. Fue en aquel momento cuando el Ayuntamiento y el Ministerio acordaron darle una función. A pesar de que en aquel momento no se usaban edificios de estas características para funciones públicas, concluyeron en que sería un buen enclave para abrir la Casa de América. Y el día clave fue 25 de julio de 1992, fecha que también será conmemorada con una exposición de las portadas de periódicos de los diarios más importantes de Iberoamérica.



@scamarzana

Programación del año

Seguramente los marqueses de Linares estaría contentos de volver a casa con un motivo tan singular. El objetivo es "dedicar el año a hablar de Iberoamérica, un pretexto para reflexionar sobre América en estos años", apunta Santiago Miralles, director de la Casa de América. Entre las actividades preparadas destaca la vuelta de La Estafeta del Viento, revista que dejó de funcionar en formato físico por problemas de financiación y se recupera ahora en formato digital. En ella se podrán las aportaciones de poetas y críticos sobre la producción Iberoamericana. Además, cada mes se realizará en las salas del Palacio un reportaje fotográfico, entrevistas y encuestas a los usuarios sobre aspectos como los libros o películas de referencia. Además de un variado ciclo de conferencias que anotamos aquí:



- Conferencias 25 años de América. Grandes personalidades como el cineasta Fernando Pérez, los escritores Fernando Iwasaki y Jorge Edwards, la secretaria general Iberoamericana Rebeca Grynspan, el periodista Andrés Oppenheimer y Patricia Phelps Cisneros, "abordarán desde todos los aspectos la actualidad".

- Tribuna Alto Patronato se trata de un ciclo que invita a los máximos responsables de las empresas e instituciones que forman parte del Alto Patronato de la Casa de América para impartir su visión de América.

- Ciclo de Encuentros con los Embajadores Americanos

- Pensar América, pensar España es una de las apuestas que invitan a reflexionar sobre problemas políticos, sociales y culturales.

- Ciclo Cardenal Cisneros con motivo del quinto aniversario de su muerte.

- Ciclo Releyendo a Rulfo con mesas redondas y lectura de sus obras.

- Homenaje 50 años de Cien años de soledad en el que habrá una lectura continuada de la novela y la proyección de El coronel no tiene quien le escriba

- Homenaje 100 años de Augusto Roa Bastos

- Homenaje 50 aniversario de la muerte del Che a cargo de su hermano, que acaba de publicar Mi hermano el Che

- Conferencia Trump y Mandela a cargo del periodista John Carlin y las exposiciones Aquel 25 de julio de 1992 y 25 años de América, 25 años de la Casa de América