La Sala Alcalá 31 inaugura la exposición Gran Sur: arte contemporáneo chileno en la Colección Engel, una exposición que reúne un conjunto de obras de la Colección Engel. Se trata de la primera vez que se presenta en España una muestra tan amplia de obras de artistas chilenos de finales del siglo XX y principios del XXI. La exposición no solo representa una exhaustiva introducción al arte chileno que se ha producido en las últimas décadas, sino que también entrega una visión distinta de la extraordinaria creatividad exhibida por varias generaciones de artistas chilenos tanto dentro como fuera del país.
Comisariada por Christian Viveros-Fauné la exposición agrupa obras cumbre del arte chileno contemporáneo en ochenta y nueve obras ejecutadas por treinta y siete grandes artistas. Desde el legendario The Laughing Alligator, vídeo que Juan Downey rodó en la Amazonía venezolana en 1979, hasta cáusticas piezas políticas de producción más reciente. Además de la obra que da título a la exposición, Gran Sur, el enorme neón de Fernando Prats exhibido en la Bienal de Venecia 2011 y que se hace eco de una publicidad divulgada en 1911 por el explorador polar Ernest Shackleton para su fallida expedición a la Antártida: “Se buscan hombres para viaje arriesgado, poco sueldo, frío extremo, largos meses de oscuridad total, peligro constante regreso a salvo dudoso, honor y reconocimiento en caso de éxito”.
Claudio Engel ha hablado sobre la apertura de un museo dedicado a su colección y ha resaltado que su objetivo es “dar a conocer a nuestros artistas en el mundo para que Chile pueda explicar su historia a través del arte”. Refiriéndose a los disturbios que sufre el país ha afirmado que “tenemos un Chile convulsionado y dividido en dos desde el 18 de octubre y queremos tratar de que el arte pueda volver a unir a un país para que sea transversal en sus ideas, como todo arte debe ser”.
Esta muestra reúne pintura, escultura, fotografías, instalaciones, vídeo proyecciones, obra textil y obra gráfica, además de proyectos híbridos y presentaciones multidisciplinarias. “Considerando la gran revuelta social que comenzó a mediados de octubre de 2019, Gran Sur presenta una historia de Chile y un relato del arte chileno que está lejos de ser finalizados”, explica Christian Viveros Fauné.
Realizadas por trece mujeres, veintiún hombres y tres colectivos, las obras que conforman esta exposición demuestran un fuerte compromiso tanto con la experimentación formal como con los principales temas de nuestro tiempo. Compuesta por casi un centenar de piezas creadas en todo tipo de soportes, la muestra exhibe uno de los rasgos más característicos del arte chileno: una alteridad tan excéntrica como privilegiada.