Banksy vende por 20 millones de euros su obra dedicada a los sanitarios
Las ganancias de la venta de la obra, que el artista británico regaló a un hospital de Southampton, se destinarán a la sanidad pública
24 marzo, 2021 11:01Game Changer, del artista callejero británico Banksy, se ha vendido por cerca de 20 millones de euros (16.758.000 £ / 23.176.314 $ / 19.422.522 €) en Christie's en la 20th Century Art Evening Sale que tuvo lugar este martes 23 de marzo. La obra apareció el 6 de mayo de 2020, durante la primera ola de la pandemia mundial, en el Hospital Universitario de Southampton, aunque el obsequio de Banksy a la institución siempre estuvo destinado a venderse. A través del Southampton Hospitals Charity, las ganancias de la venta se utilizarán para financiar proyectos de bienestar para el personal y los pacientes, y se distribuirán a una comunidad más amplia de proveedores de atención médica tanto dentro del sistema de salud británico como en los sectores benéficos. Una reproducción permanecerá a la vista para futuros pacientes, visitantes y personal del hospital. La obra, en la que un niño juega con el muñeco de una sanitaria, atrapó el zeitgeist de aquel momento, cuando en todos los países del mundo se homenajeaba el trabajo en primera línea de los empleados de los hospitales aplaudiendo desde las ventanas y balcones de sus casas. Christie's donará además una parte importante de la prima del comprador a las mismas causas. “Ha sido un gran privilegio trabajar en la venta de Game Changer", asegura Katharine Arnold, codirectora de arte contemporáneo y de posguerra en Europa de Christie's. "Más aún en un día de reflexión nacional, cuando se cumple un año desde el primer confinamiento en Gran Bretaña y con tantas vidas perdidas en todo el mundo. Banksy es un artista extraordinario cuya obra es un barómetro constante del sentimiento nacional. Con la imagen perfecta de un niño jugando con su muñeco de superhéroe, enfermera de Cruz Roja Internacional, capturó la esencia de ese momento en el tiempo". Esta obra, que en principio tenía un precio estimado de entre 2,5 y 3,5 millones de libras, supera con mucho margen el récord anterior de Banksy, que ostentaba con once millones de euros Devolved Parliament (Parlamento transferido), que mostraba a unos chimpancés ocupando todos los escaños del Parlamento Británico. "Este increíble regalo nos ayudará a enfocarnos en promover y proteger el bienestar de nuestro personal mientras se recuperan de lo vivido en el último año", comenta el director ejecutivo interino del University Hospital Southampton. "Como obsequio caritativo, garantiza que nuestro personal pueda opinar sobre cómo se gasta el dinero en beneficio de ellos, de nuestros pacientes y de nuestra comunidad, y es una forma fantástica de agradecerles y recompensarlos por los sacrificios que han hecho". Con detalles nítidos y lineales, Game Changer, obra pintada a mano, muestra a un niño jugando con una selección de muñecos de superhéroes. Batman y Spiderman yacen descartados en una papelera y el niño agarra un nuevo ídolo: una enfermera enmascarada vestida con el uniforme internacional de la Cruz Roja, con una capa ondeando y el brazo extendido hacia el cielo. La imagen iba acompañada de la siguiente nota: "Gracias por todo lo que estáis haciendo. Espero que esto ilumine un poco el lugar, aunque solo sea en blanco y negro ". Cargado con de la expresividad de una ilustración de un libro para niños, la imagen provoca una serena conmoción. La composición es monocromática, salvo por la cruz roja que brilla en el uniforme de enfermera. Captura además un momento de inocencia, registrando el juego de luces y sombras en el rostro, el cabello y la ropa del niño. Parece mirar hacia un amanecer más brillante, seguro al saber que los verdaderos superhéroes caminan entre nosotros. En una época de cambios frenéticos e inestabilidad, Game Changer ofrece en última instancia una imagen de esperanza. La irreverencia, la parodia y la llamados a la acción están ausentes: en cambio, representa un tributo a quienes continúan cambiando el rumbo de la pandemia. Su estilo es de una pureza nostálgica, pero su mensaje mira firmemente hacia el futuro. Sin embargo, como obra de arte, seguirá siendo para siempre un símbolo de su tiempo: un recordatorio sobre quienes están cambiando de verdad el mundo y del trabajo vital que realizan.