La idea era provocadora: organizar una exposición que solo pudiera ser visitada por mujeres, dándole la vuelta a la discriminación que estas han sufrido a lo largo de la historia. Para que los hombres experimentaran qué se siente cuando se te niega la entrada a un lugar simplemente por tener un género determinado.
En esto consistía Ladies Lounge ("Salón de damas", en contraposición a los "salones de caballeros"), una exposición ubicada en una de las salas del Museo de Arte Antiguo y Moderno (MONA, por sus siglas en inglés) de Hobart, en Tasmania. La muestra, inaugurada en 2020, incluía algunas de las mejores obras de la colección del museo, como varios cuadros de Picasso, uno de Sidney Nolan y antigüedades de África, Mesopotamia y Centroamérica. Además, había mayordomos masculinos que ofrecían masajes en los pies y champán a las visitantes.
Pero Jason Lau, un visitante del museo en 2023, decidió presentar una denuncia apelando a la Ley contra la Discriminación de Tasmania. Argumentó que había pagado el precio completo de la entrada sin que nadie le advirtiera de que había una sala a la que no podría entrar, y que, en tal caso, debería cobrarse un precio reducido a los hombres. El tribunal le dio la razón, por lo que la muestra tuvo que ser cancelada en abril de 2023.
La ideóloga de la curiosa exposición, inaugurada en 2020, fue la artista y comisaria estadounidense Kirsha Kaechele, esposa del propietario del museo, David Walsh. Para sortear la prohibición, ha tenido una ingeniosa idea: convertir esa sala en un aseo para mujeres, de modo que ahora el cuadro de Picasso Mujer acostada en el sofá (1932) luce sobre un lavabo y otra obra del pintor malagueño, su versión de El almuerzo sobre la hierba (1961), está colgada sobre un retrete.
"Nunca tuvimos baños de mujeres en MONA, antes todos eran unisex", reconoce Kaechele en una publicación de Instagram. La sala ha sido reformada en los últimos meses para poder reabrirla convertida en un aseo femenino. Después de la sentencia judicial que impedía que el museo tuviera una exposición solo para mujeres, "no sabía que hacer con todos esos Picassos", explica con ironía la artista y comisaria, y advierte de que, si es necesario, abrirán la sala de nuevo "como iglesia, escuela, boutique glamping, instalaciones, etc., bajo la sección 26 de la Ley Antidiscriminación".
En su mensaje también señala que las mujeres transexuales son bienvenidas en la sala. "¡Disfrutad! (señoras) (Eso aplica a TODAS las damas, tú sabes si lo eres y, si lo eres, eres bienvenida". Además de un vídeo y varias fotos en los que se puede ver la reforma de la sala reconvertida en aseo femenino, la publicación incluye una mano enguantada de terciopelo verde haciendo una peineta.