Además del óscar de Parásitos, del gran éxito de la serie El juego del calamar, de tener la boy band más imporante del mundo: BTS, o la llegada del kimchi, esa col fermentada, a nuestras mesas, la República de Corea también se está conviertiendo en un importante potencia para la venta y consumo del arte contemporáneo. 

El milagro coreano ha pasado en medio siglo de ser una de las naciones más pobres del mundo, con un PIB comparable a Nigeria después de un férreo control nipón hasta 1945 y una devastadora guerra, a convertirse en la undécima economía mundial

Una sólida apuesta por la inversión en las economías creativas que demuestra cómo la innovación en cultura puede impulsar la transformación económica, la creación de empleo y el crecimiento de un país, e incluso llegar a convertirlo en una influencia idelógica de persuasión "blanda" en todo el mundo.

El stand de ALZUETA GALLERY en KIAF 2024. Foto: Cortesía de la galería

Corea es uno de los ejemplos más representativos de "Soft Power"; evitando el uso de la fuerza o la coerción, y valiéndose de medios más sutiles como su cultura, su modelo social o sus valores políticos son capaces de lograr un alto impacto global.

Lo saben bien algunas de nuestras galerías que buscan expandir su mercado más allá del coleccionismo peninsular: Albarrán Bourdais, VETA, La Causa Gallery, Yusto & Giner, Galería LaBiBi, WeCollect, Pigment Gallery y Alzueta Gallery han viajado hasta Seul para participar en su feria más internacional.

Hemos hablado con ellos para que nos dieran algunas claves para la conquista del mercado asiático. 

Manuela Medina, directora de la galería La Causa (Madrid) afirma: "El mercado asiático, y en particular el de Corea del Sur, es un mercado en ascenso, se trata de una apuesta a futuro de la que no se puede prescindir". 

Hyangmok Baik, uno de los artistas coreanos más prometedores que trabaja con WeCollect. Foto: Cortesía de WeCollect

Las galerías que incluyen en su programación contenidos más cercanos a su cultura visual se ven especialmente interpeladas: "La cultura visual de países asiáticos está muy influenciada de la cultura manga y el Kawaii, que se acerca en aspectos como la composición, el colorido o las temáticas a varios de los artistas que conforman nuestra programación expositiva".

Marc Bibiloni, director de la galería LaBiBi de Palma de Mallorca, afirma que la conquista asiática requiere una comprensión profunda de sus gustos y preferencias, además de establecer relaciones de confianza con coleccionistas, curadores y otros actores clave. 

"Los coleccionistas coreanos son conocidos por ser apasionados, informados y estar dispuestos a invertir en piezas que consideran significativas. Además, el apoyo institucional y el creciente número de museos hacen que sea un mercado con un enorme potencial de crecimiento y desarrollo". 

Enrique del Río, galerista de WeCollect (Madrid) respecto al mercado coreano expone que: "En Corea se produce una dualidad muy curiosa y contradictoria. Por un lado es un mercado con muchas barreras de entrada: el propio país, la distancia, la cultura, el idioma, la moneda, la forma de tratarse y relacionarse, de negociar, etc".

"El mercado coreano es tentador pero es muy engañoso. No todo funciona. Pasa de todo a nada con una velocidad increíble".

María Rodríguez, directora de Yusto & Giner

Después, en contra de lo que pueda parecer, salvando el idioma, la estética, etc. "la cultura coreana tiene muchísimo que ver con la española, son cercanos, abiertos, muy sociales, cariñosos, etc.  por su proveniencia católica quizá) y eso hace que nos entendamos muy bien".

María Rodríguez, directora de Yusto & Giner, nos cuenta: "Este es nuestro segundo año en Kiaf Seúl. Decidimos participar en una segunda feria para consolidar nuestra imagen en el país y ampliar relaciones con potenciales clientes allí, así como establecer una relación más personal con clientes previos".

Cuando le preguntamos por la idiosincrasia del mercado coreano denota que requiere un estudio previo y planificar una buena estrategia de marketing y comunicación así como construir alianzas y una red de colaboración con otras galerías".

"En los últimos años ha habido un mayor volumen de negocio así como una mayor demanda de arte en la zona también gracias a sus favorables políticas fiscales y la creciente y efervescente escena cultural y artística", añade.

 "Las infraestructura cultural del país atrae la inversión en arte, tanto doméstica como extranjera, y también la emergencia en los últimos años de una base de coleccionistas jóvenes impresionantes".

Albarran Bourdais

Ferran Josa, director de la galería Pigment Gallery (Barcelona) nos narra que la suya fue una de las pioneras en participar: "detectamos que había una oportunidad de mercado para presentar la obra de Edgar Plans cuando nadie lo conocía. El éxito con Edgar fue enorme y repetimos al año siguiente que coincidió con la explosión en el mercado de este y otros artistas del mismo perfil".

Josa no cree en fórmulas mágicas: "No creo en una fórmula. Al final se trata de una combinación de buena suerte y acertar con la oferta y el momento. Diría que un punto a favor es la edad media del comprador. Hay realmente coleccionistas que ya empiezan a tener buenas colecciones desde edades muy tempranas, y son rápidos en educar el gusto".

"El mercado coreano es tentador pero es muy engañoso. No todo funciona. Uno de los motivos es que en los últimos años se vendía mucho. Pero el año pasado se notó un descenso importante y muchas galerías se llevaron una sorpresa desagradable al no conseguir sus objetivos. Es un mercado que pasa de todo a nada con una velocidad increíble".

Eloy Molares de la galería VETA by Fer Francés (Madrid) afirma rotundo: "Llevamos varios años participando en la feria de Busan, también en Corea, así como en Tokio, Taipéi, Pekín, Shanghai, Hong Kong o Singapur, gran parte de nuestro mercado está en Asia. Es un mercado muy joven pero que ha aprendido mucho de lo bueno y malo que ha pasado en Pekín o Hong Kong como epicentros del mercado asiático".

Claudia Comte: 'Turn and Slip'. Foto © Gunnar Meier

Eva Albarrán y Christian Bourdais, directores de Albarrán y Bourdais (Madrid) nos explican su vínculo con el país asiático: "Además de trabajar con la artista coreana Koo Jeong A desde hacer años, a raíz de un encuentro en ARCO con los fundadores del museo K+L de Seul, hemos estado colaborando con ellos para una importante exposición de la artista Claudia Comte, que se inaugura el 2 de septiembre". 

Y puntualizan: "Las infraestructura cultural del país atrae la inversión en arte, tanto doméstica como extranjera, y también la emergencia en los últimos años de una base de coleccionistas jóvenes impresionantes".

Sonia Castilla, responsable del departamento de ferias en Alzueta Gallery (Madrid-Barcelona) nos destripa su evolución: "KIAF estaba abierta a las galerías internacionales, pero apostó muy fuerte por hacerse más atractiva y absorbernos a todos aquellos que queríamos estar presentes en Asia pero no teníamos cómo, en el 2023 el proceso de aceptación fue mucho más difícil porque la demanda se multiplicó". 

Respecto al componente humano de la feria relata que el equipo es maravilloso y que algunos de los miembros hablan español. Las relaciones culturales entre nuestros países son muy interesantes: el Instituto Cervantes tiene una sede en Seúl, España es de los principales destinos turísticos para los coreanos, nuestras universidades llevan teniendo relaciones desde hace décadas. Era cuestión de tiempo que nuestros mundos del arte se entrelazasen".

Koo Jeong A: 'GAKCHAL#8,' 2023. Foto: Cortesía de Albarrán Bourdais

Castilla afirma rotunda que la conquista del mercado asiático se hace primero con respeto y que "Aunque a primera vista puede que parezca que somos muy diferentes, a los españoles y coreanos nos une esa cultura familiar y grupal tan bonita que tenemos. También el desparpajo. Por experiencia te puedo decir que a los clientes les encanta la familiaridad y alegría del equipo

Respecto a que diferencia este mercado con respecto a otros afirma: "Tienen muchas ganas de ver qué se lleva, de conocer artistas nuevos, de adquirir nuevas piezas para sus colecciones. Ambas partes tienen mucho que ofrecer y se retroalimentan. Es una relación muy próspera que no dejará de darnos alegrías".