Image: Atrapando la sección

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Arquitectura

Atrapando la sección

Idoia Otegui y Marcos Parga amplían un colegio en Madrid

15 noviembre, 2007 01:00

Vista de la casa, en Lugo

Como una partida de ajedrez, en la que sobre el tablero encontramos las piezas con sus reglas y en la cabeza creamos los movimientos inteligentes, ordenados y precisos, para dar jaque al adversario. Así es la arquitectura de Marcos Parga e Idoia Otegui. Visto desde esta óptica, entendiendo el "adversario" como el problema a resolver planteado por el cliente (un lugar, una economía, un deseo, un programa) estos arquitectos conocen bien las reglas del "juego correcto y magnífico de los volúmenes bajo la luz" y las ponen en práctica desde la sección: sus proyectos surgen de la sección, y si así no fuera, no importa, pues de un modo u otro, moviendo las fichas, la atrapan.

En el Polideportivo Numancia (Santander) es la sección la que cose el espacio abierto al cielo entre tres colegios que comparten el patio de juegos y la necesidad de introducir un nuevo polideportivo en dicho lugar abierto: el problema a resolver. Coronando la sección, en la cubierta del nuevo polideportivo, un nuevo patio limitado por esbeltas rejas metálicas hace un guiño al Gimnasio Maravillas que Alejandro de la Sota levantara en Madrid hace ya 45 años. Y con sutileza lecorbuseriana, cosen los diferentes planos creados (al patio exterior abierto, el patio interior cubierto del polideportivo y el patio exterior cubierta del mismo) por medio de un sistema de rampas.

Marcos Parga e Idoia Otegui explican en sus dibujos y esquemas los diferentes movimientos a lo largo de cada partida con una claridad tal que enamora por su lógica y sencillez. Hacen comprensible lo que muchas veces permanece oculto y simplifican lo complejo sin perder un ápice de intensidad. Narran cada una de las operaciones aplicadas, diseccionan y desmenuzan al adversario hasta tal punto que terminan por darle jaque.

Y así, detrás del frío, insulso y mecánico nombre con el que llaman a sus casas (P12, M1, M2, M3, M4, T45, H), características que podemos encontrar en una primera lectura rápida y despreocupada de ellas, descubrimos cuán equivocados estamos en el juicio, pues estas casas son un ejercicio nada desdeñable de integración en el entorno, materialidad constructiva y, por supuesto, trabajo de la sección.

En la casa P12 (Lugo) se van sucediendo las diferentes secciones transversales que van creando los diferentes espacios de la casa: espacios horizontales abiertos al paisaje y espacios verticales de circulación o estancia inundados de luz. Introducen la ría en la casa, tal y como desean sus clientes y transforman el paisaje formado por un bosque de eucaliptos circundante en "cuadros" sobre los muros interiores de la vivienda, gracias a las vistas enmarcadas que se van abriendo en las fachadas. Su trabajo en sección no desprecia la claridad y el orden de sus plantas, limpias y rigurosas, bien organizadas y que revelan de nuevo, el conocimiento de las reglas del juego.

En la Carpet House (también en Lugo) de nuevo la sección es la clave para resolver un problema de vistas y programa. En esta casa parece desvelarse un interés por la estructura en equilibrio que recuerda la villa en Burdeos de OMA / Rem Koolhaas, piscina en la cubierta y terraza jardín incluida. La casa "como un árbol" de nuevo explicada de manera conceptualmente brillante en sus dibujos y esquemas.

En su última obra construida, la ampliación del colegio Bernadette (Aravaca, Madrid) con un polideportivo y un aulario, de nuevo aparecen las fichas movidas en los estratos que define la sección. El inferior para la pista deportiva y vestuarios; el intermedio es el vacío de la pista, por el que se produce el acceso; y sobre este vacío, el tercer estrato, donde se sitúan las aulas agrupadas de manera que entre ellas se disponen patios abiertos al cielo por los que toman luz. De este modo se define un estrato totalmente opaco que quiere flotar sobre la luz y habitar la estructura que, precisamente lo permite, y se convierte en la idea fundamental del proyecto, una operación clara y rotunda que se resuelve con sencillez. Con la sencillez que se adquiere cuando se conoce la complejidad de las reglas de este juego que llamamos Arquitectura.

Marcos Parga e Idoia Otegui formaron en 1999 el equipo PO2 y desde entonces han sido seleccionados en el Pabellón de España de la VIII y X Bienal de Arquitectura de Venecia y han recibido numerosos premios y distinciones en concursos y obras. Entre sus últimos proyectos construidos destacan la vivienda P12 (Lugo, 2003-2005), la Fundación Juan XIII (Vicálvaro, Madrid, 2002-2005) y la ampliación del Colegio Bernadette (Aravaca, Madrid 2006-2007).