Àngels Ribé: Tres puntos (2), 1972

Comisaria: Nimfa Bisbe. CaixaForum. Paseo del Prado, 36. Madrid. Hasta el 25 de marzo.

Segunda exposición que surge del acuerdo de unión de las colecciones de arte contemporáneo de la Fundación "la Caixa" y el MACBA. Si hace unas semanas el museo catalán daba ¡Volumen! a esa unión de voces, esta exposición en Caixaforum Madrid traza un recorrido que explora el uso de la geometría en el ámbito de la escultura y la instalación, desde los años 60 hasta hoy. Una clase de historia del arte.

La muestra más antigua que se conserva de "arte" procede de la cueva Blombos, en la costa sur de Suráfrica. Realizada hace unos 77.000 años, es un patrón regular, una sucesión de figuras romboidales, grabadas en el borde esmerilado de un fragmento de ocre. Desde entonces, la geometría es una de las estructuras de pensamiento más influyente en los artistas y en el arte. Sólo con recorrer los movimientos surgidos durante las vanguardias históricas encontraríamos que la mayoría de ellos, incluidos los más subversivos, hicieron de la geometría un instrumento primordial. Así fue, también, para las tendencias emergentes en los años 60 y 70, con un nuevo y pujante rebrote en los 90 que, como anuncia el título de esta magnífica exposición, ha persistido vivo hasta la fecha.



La gestión conjunta de las colecciones del MACBA y la Fundación "la Caixa" está dando ya sus primeros frutos y, como certifica esta muestra, lo que cabía considerar que era una buena idea, resulta todavía mejor. Ambas colecciones se complementan tanto en la cronología como en la naturaleza y criterio de sus adquisiciones: del arte de los 60 en adelante la colección del MACBA, con una mirada más documental, a la búsqueda de aquello lateral al sistema; y enfocada desde los discutidos 80 la colección de "la Caixa", que ha configurado una colección importante para cubrir tanto el lado singular del artista como para reflejar su contexto.



Además, y es lo que me parece más significativo, esta unión demuestra que las diferentes líneas de interpretación contemporánea del arte que ofrecen ambas colecciones -más ideológica la del MACBA y más estética la de "la Caixa"- ayudan a entender lo que ha ocurrido en estas décadas del arte reciente, tanto en el ámbito de las ideas como en el de las percepciones y las emociones. La comisaria, Nimfa Bisbe, que ha colaborado en la muestra con el director del MACBA, Bartomeu Marí, fija en su texto del catálogo el ámbito de la propuesta y sus objetivos: (explorar) "el uso de la geometría en el ámbito de la escultura desde los años 60 hasta nuestros días. La muestra explora la ruptura de las formas tradicionales y la consiguiente redefinición de la obra de arte propiciada por el minimalismo y las prácticas performativas, que establecieron una relación interactiva con el espectador". Seguidamente, apunta que una buena parte de los artistas fueron influidos por las derivas europeas del constructivismo y otros por las consecuencias del minimalismo norteamericano.



La exposición se abre con una sala individual, introductoria, "Metafísica de la geometría", que funciona como declaración de intenciones. Tres piezas de James Lee Byars -paralelepípedo vertical, esfera y cubo- de mediados de los 80, en mármol blanco, expuestas en sus respectivas vitrinas. Tienen, como el nombre del espacio, algo de metafísico, y a la vez, sólido; trascendentes por su invasora presencia.



Sigue una calculada secuencia que alterna salas conjuntas y temáticas con otras individuales muy significativas. Así "Formas esenciales" -con un sugerente diálogo entre Donald Judd, Richard Long y el Hans Haacke más fenomenológico-, o "Geometría en acción", con performances de Francesc Torres, Carles Pujol, Àngels Ribé, Eleanor Antin, Josep Ponsatí y Bruce Nauman, y el vídeo Spiral Jetty, de Robert Smithson. "Dibujando el espacio" o "Minimalismo en expansión", abarcan desde Rachel Whiteread a Rodney Graham, incluye un feliz hermanamiento de Jordi Colomer con el desaparecido Absalon y reúne en un mismo espacio a Sergi Aguilar, Txomin Badiola, Pello Irazu y José Dávila. No faltan las interacciones con la arquitectura de Dan Graham y Gordon Matta-Clark. A la impresionante instalación Piedras negras bajo luz amarilla, realizada por Bruce Nauman en 1987, le siguen James Turrell, el ya citado Smithson, Ettore Spalletti, David Maljkovic y, como corona final, las proyecciones de Nueve tipos de terreno, del mexicano Damián Ortega.