Vista de sala

Tiene algo de poeta, pero también de arquitecto, que conserva de sus años de formación al disponer sus obras en el espacio de la galería y abordar sus composiciones textiles. Joël Andrianomearisoa (Antananarivo, Madagascar, 1977) constuye imágenes que seducen al espectador por su extraordinario lirismo. Si en su primera individual en Sabrina Amrani tomaba como punto de partida De profundis, la carta escrita por Oscar Wilde a su amante desde la cárcel, aquí se apropia de un poema de Élie-Charles Abraham recogido en Petals (1940), una antología dividida en las estaciones del año en su Madagascar natal tras la ocupación francesa. Bajo el título Les saisons de mon coeur (Las estaciones de mi corazón), el artista utiliza los tejidos para reflexionar sobre el tiempo, sus ciclos, y su proyección dentro del alma. En la primera parte, que tiene por tema la luz, el creador cuelga diferentes obras, como si fueran pinturas, conformadas por trozos de tela encontrados que une entre sí. Se trata de la serie The Labyrinth of Passions, una evolución de sus trabajos anteriores en seda, donde los accidentes en el cosido de sus partes, colores y formas, crean un paisaje interior volátil, como las pasiones, en paralelo a la luz que incide en la tierra en diferentes momentos del día o del año.



Sin duda la segunda parte de la muestra es la más personal. Aquí, experimenta por primera vez con el bordado en cincuenta pequeñas piezas que llevan en sus títulos el nombre de las estaciones. Elaboradas por bordadoras locales, según su diseño, Andrianomearisoa dejó a su elección las combinaciones de colores, dando como resultado una obra de estética accidental sobre las diferentes percepciones del tiempo en esta comunidad, como en la obra del poeta malgache.



@SilviaSSC91