'Commandos', elegido mejor videojuego español de la historia
El juego de 1998 salió elegido en la gala “Jugando en casa” que se celebró el pasado jueves 4 de abril en el Gran Teatro Caixabank Principe Pío.
Hace un par de meses, me contactaron de Utad (un centro universitario de Las Rozas centrado en tecnología y arte digital) para formar parte de un jurado experto que trataría de examinar 45 años de historia del videojuego español y configurar una lista con los mejores. Luego, esa lista se abriría a la votación del público general, con el objetivo de determinar cuál había sido el mejor juego español de todos los tiempos.
En estas más de cuatro décadas de andadura, a nadie se le había ocurrido emprender una iniciativa semejante con tanta solemnidad y aunque este tipo de galardones son ya injustos desde un punto de vista conceptual, la gala donde se dieron a conocer los resultados, celebrada el pasado 4 de abril en el Gran Teatro Caixabank de Príncipe Pío en Madrid, sirvió para poner en valor a los pioneros del software español. Viejos rockeros que se partieron el lomo para construir una industria de la nada y con la totalidad de los medios y la intelligentsia de este país en contra.
La gala en sí, presentada por el comunicador Jota Abril, discurrió con normalidad, aunque en ocasiones con un tono excesivamente desenfadado. Se hizo un recorrido por las distintas etapas de la historia del desarrollo español mediante unos breves videos documentales y se procedió a destacar a algunos de los sellos más reconocibles de esos años con galardones a la trayectoria.
['Alone in the Dark', el gótico sureño]
Made in Spain, Dinamic Software, Topo Soft y Opera Soft subieron a recibirlos con muchos de sus principales impulsores, presentes en el evento. Como entreacto, salió a escena un grupo musical de ska a hacer una versión de la banda sonora de El libro de la selva, una performance bastante arbitraria que se alargó bastante y que dejó a muchos de los presentes un tanto patidifusos.
No será por falta de bandas sonoras. Una performance con algunas composiciones de Berlinist (GRIS) o Carlos Viola (Blasphemous) probablemente hubiera encajado mejor. En cuanto a los resultados, el ranking de los mejores juegos españoles de la historia quedó de esta manera:
1. Commandos: Behind Enemy Lines (1998)
2. Blasphemous (2019)
3. La Abadía del Crimen (1987)
4. Pc Fútbol (1992)
5. Commandos 2: Men of Courage (2001)
6. GRIS (2019)
7. Blasphemous 2 (2023)
8. Castlevania: Lords of Shadow (2010)
9. Metroid Dread (2021)
10. Blade: The Edge of Darkness (2001)
El 28% de los votantes del público general se decantaron por la obra seminal de Pyro Studios. El 22% se decantó por el metroidvania de The Game Kitchen y el 20% por el juego de Opera Soft.
Cuando Ignacio Pérez Dolset, productor del juego en su día pero también el organizador de la gala a través de la universidad que regenta, subió a recoger el premio y a dar un discurso dijo que no estaba contento. Que él había hecho esto para rendir homenaje a la gente sobre la que él y otros como él se apoyaron para construir sus carreras.
Entiendo que podía ser un papelón, que muchos podían alegar que había montado un sarao impresionante simplemente para darse un premio a sí mismo. Pero Ignacio, Gonzo y todos en esa sala sabíamos desde el primer momento que Commandos tenía muchas papeletas para ser elegido.
['Dragon's Dogma 2', aventuras de la vieja escuela]
Es posible plantear un debate sobre si es el mejor juego de la historia del software español. Probablemente no, pero simplemente porque han pasado más de veinticinco años desde entonces y sin ir más lejos, su secuela (como hacen casi todas las secuelas) era muy superior en muchas cosas. Lo que no se puede negar es que tuvo un éxito sin parangón, que prácticamente se inventó un género y que fue un auténtico parteaguas.
Al final, en el momento en el que abres la votación al público, todo se convierte en un concurso de popularidad. Y ahí la nostalgia, las ventas y los sentimientos patrioteros tienen mucho que decir.
Metroid Dread es, desde un punto de vista formal, el mejor juego que se ha hecho en España. Y Castlevania: Lords of Shadow es un triunfo que incluso hoy, casi quince años después, permanece incólume. Pero ambos forman parte de licencias japonesas y quizá estén demasiado recientes en el imaginario colectivo como para auparse a los puestos que en verdad les pertenecen.
De todas formas, después de 45 años, fue bonito asistir a una ceremonia donde se celebró el legado de estos viejos rockeros que pusieron los cimientos de una industria contra viento y marea: enormes dificultades técnicas, falta de medios, falta de conocimientos y de un reservorio de talento tan amplio como el que tenemos hoy en día y, sobre todo, una opinión publicada histérica y tremendamente injusta.
Ojalá no tengan que pasar otros 45 años para la siguiente.