Marvin Minsky

El estadounidense Marvin Minsky (Nueva York, 1927), considerado uno de los padres de la Inteligencia Artificial, ha sido reconocido con el Premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento en la categoría de Tecnologías de la Información y la Comunicación. Minsky es, además, autor de contribuciones esenciales, teóricas y prácticas, en matemáticas, ciencia cognitiva, robótica y filosofía. También ha sido uno de los creadores del prestigioso Laboratorio de Inteligencia Artificial del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y tuvo un papel destacado en el establecimiento del Media Lab.



Minsky dijo al recibir la noticia del reconocimiento que está convencido de que se llegará a crear máquinas al menos tan inteligentes como los humanos. Sin embargo, no es muy optimista respecto al plazo en el que podría lograrse: "Depende de cuánta gente trabaje en los problemas adecuados. Ahora mismo no hay ni recursos ni investigadores suficientes". Y, fiel a su reputación de científico iconoclasta, añade: "Los grandes avances en Inteligencia Artificial se dieron entre los 60 y los 80 del pasado siglo. En los últimos años no he visto nada que me sorprenda, porque ahora la financiación se enfoca más en aplicaciones de corto plazo que en ciencia básica".



"Sus trabajos sobre el aprendizaje de las máquinas en sistemas que integran la robótica, el lenguaje, la percepción y la planificación, además de la representación del conocimiento basada en marcos (frames), han conformado el campo de la Inteligencia Artificial", señaló el jurado, en el que actuó como secretario Ramón López de Mántaras.



Minsky es catedrático de Ingeniería Eléctrica y Ciencias de la Computación en el MIT y titular de la Cátedra Toshiba of Media Arts and Sciences. Fue uno de los fundadores en la década de los 50 de todo un nuevo campo científico, el de la Inteligencia Artificial, cuyo objetivo era transformar los computadores del momento -entonces máquinas de calcular-, en máquinas inteligentes, capaces de incorporar funciones propias del pensamiento. El impacto de esa contribución fue enorme porque el computador convencional pasó a convertirse en la primera máquina universal.



Minsky considera el cerebro como una máquina cuyo funcionamiento podría ser estudiado y replicado en el ordenador, que a su vez se convierte en una vía para conocer mejor el cerebro y las funciones mentales superiores. Minsky impulsa la idea de dotar a las máquinas de sentido común, es decir, del conocimiento que el ser humano adquiere a través de la experiencia.



La Inteligencia Artificial nació oficialmente como disciplina en una conferencia de ciencias de la computación en el Dartmouth College (New Hampshire, EE.UU), en 1956. Los padres de este nuevo campo fueron, además del premiado por la Fundación BBVA, John McCarthy, de la Universidad de Stanford, y Allen Newell y Herbert Simon, ambos de Carnegie Mellon. Minsky es autor de "La sociedad de la mente" (1986) y de la primera red neuronal capaz de aprender, SNARC, en 1951; del primer display gráfico portátil -montado en la cabeza-, en 1963; y del microscopio confocal (patentado en 1957), un tipo de microscopio que reconstruye imágenes tridimensionales (muy usado actualmente en las investigaciones biológicas).