Mark Zuckerberg

Ahora sabemos por qué Facebook no tiene miedo a cometer errores, ya sean los tropezones de la empresa en cuanto a la política de privacidad o el fracaso de nuevos proyectos como Facebook Home o Slingshot. Mark Zuckerberg (White Plains, Nueva York, 1984), cofundador y presidente de la red social, piensa que los errores son buenos. Respondiendo a las preguntas de los usuarios de Facebook en su segundo encuentro con el público ocurrido en la oficina central de la compañía en Menlo Park, California, y emitido en streaming, Zuckerberg sostuvo que la gente exitosa no solo aprende de sus errores sino que pasa la mayor parte del tiempo cometiéndolos.



"Si tienes éxito, la mayoría de las cosas que has hecho fueron equivocadas", comentó. "Lo que de verdad importa es lo que terminas haciendo bien". Si consigues hacer algunas cosas bien, dijo, "puedes hacer algo bastante importante que cambie el mundo". Al igual que en su primer encuentro con el público, Zuckerberg trató todo tipo de asuntos como la política de privacidad de la empresa y el nuevo instrumento que ayuda a la gente a buscar publicaciones anteriores.



A la pregunta de si la red social va a añadir un botón de 'No me gusta', respondió que la compañía se lo estaba planteando. El confudador de Facebook dijo que probablemente no haya un botón que muestre la aversión debido al potencial de hacer daño y herir los sentimientos de las personas, pero está buscando un camino para que los usuarios muestren una amplia gama de reacciones emocionales a una publicación, como tristeza, por ejemplo.



Hubo tiempo también para las bromas con algunos de los usuarios. Cuando alguien le preguntó cuál era su ingrediente favorito en una pizza, dijo que si vas a comer a lo mejor hay que darle una vuelta y ponerle pollo frito. Una mujer, que hizo saber que vive cerca de la oficina central de Facebook le dijo: "Gracias por alzar el precio de mi casa". Zuckerberg contestó: "Es la primera vez que alguien me da las gracias porque Facebook haya incrementado el precio de una vivienda". Una referencia que concierne a la comunidad de San Franciso y Bay Area sobre la expulsión de residentes de toda la vida por parte de los nuevos 'millonarios tecnológicos'.



Zuckerberg en una reunión con parte de su equipo

También hizo mención a la importancia de las habilidades a la hora de programar un software. "Si puedes codificar tienes el poder de sentarte y hacer algo sin que nadie te pueda parar", apuntó. Predijo que, tarde o temprano, las escuelas requerirán que cada alumno aprenda a cifrar, aunque sea a pequeña escala, porque esto afila las habilidades analíticas que son útiles en una amplia variedad de profesiones.



Hablando sobre el papel de Facebook en conversaciones públicas como la discriminación racial que ejerce la policía, comentó que quieren "dar voz a todos". Citó el papel de la red social en la apertura de discusiones en lugares como Oriente Medio pero evitó mencionar la reciente censura de algunas publicaciones contra el gobierno en Turquía o su reciente 'noviazgo' con reguladores de Internet chinos que insisten en un control más ajustado sobre la discusión online.



Sobre el uso de Facebook entre los niños, Zuckerberg, que no tiene hijos, comentó que la prohibición del uso de internet entre los pequeños no es la solución. "Pero no dejaría a mi hijo menor de 13 años utilizar Facebook". Oficialmente, la compañía prohíbe el uso del servicio a cualquier menor de 13 años por las restrictivas leyes americanas que se aplican sobre los niños aunque, de todos modos, muchos padres permiten a sus hijos utilizar el servicio.



Zuckerberg también admitió que estaba teniendo algún que otro problema para llevar a cabo su objetivo de 2014 y escribir una nota con palabras de gratitud todos los días. "Hay gente que ve la belleza de las cosas -dijo-, y luego hay gente que ve cosas y las quiere hacer mejor. Tiendo a ser del segundo grupo", dijo, dibujando sonrisas en su equipo ejecutivo que estaba sentado cerca.