Cine

La revolución del corto

29 festival de cine de Alcalá de Henares

7 noviembre, 1999 01:00

A partir del próximo día 12 y hasta el 20 de noviembre el Festival de Cine de Alcalá de Henares reúne a los protagonistas del último cine español: cuarenta cortometrajes sólo en la sección oficial. Y de estos, siete son de animación, un número importante para un género con el que cada día comulgan más adeptos. Fuera de concurso una novedad importante: el Festival ha organizado unas jornadas para repasar lo más destacado de la década de los 90. Muchas películas en muy pocos días. En corto, por supuesto.

El mes de noviembre del año pasado trajo un nuevo nombre para el cine español: Mateo Gil, ganador de la anterior edición del Festival de Alcalá de Henares por su corto "Allanamiento de morada". A finales de este mes, el joven realizador estrenará su opera prima, "Nadie conoce a nadie", basada en la novela homónima de Juan Bonilla. éste es el sueño de todos los directores, noveles en su mayoría, que participan en esta cita anual del cortometraje, una de las más importantes del género.

La primera novedad de esta edición está en la propia selección de los cortos: de los cuarenta que concursan por el primer premio (un millón de pesetas), siete son de animación. "Ha sido ésta una selección irregular, han llegado muchas películas animadas y muy buenas y no suele ser así", comenta Luis Mariano González, codirector del certamen junto con Pedro Medina.

Menos experimentos

Para Miguel Díez Lasangre, director de "Animal" (una de las cintas de animación), la explicación es sencilla: "Los avances informáticos hacen que la animación sea más accesible, con posibilidades plásticas mayores. Además, creo que es un género que se adapta muy bien al formato corto, es barato y no necesita de técnicos ni actores, se puede hacer prácticamente solo".

Otro cambio que se ha notado en los cortos que se presentan a concurso es que cada vez hay menos películas experimentales, "el corto ha pasado a ser un escaparate para los directores, una tarjeta de presentación, de manera que cada realizador hace lo mismo que haría en largo; se luce más y experimenta menos", dice González. Sólo "Bocamina", de Javier Codesal y "Dreamers", de Félix Vicarret se pueden considerar como filmes experimentales en esta edición.

Pero la mayor parte de las películas son de ficción y, entre ellas hay comedias, thrillers, pequeñas incursiones en el musical, "no hay una tendencia clara en este momento en el corto español", comenta Luis González. Y, entre esta enorme variedad, hay también una adaptación, "El huésped", dirigida por Pablo Fernández (Oviedo, 1972) y basada en el relato de Albert Camus del mismo título. No es el primer trabajo de Fernández, que ya dirigió en 1997 "La mamá", uno de los cortos nominado a los premios Goya ese mismo año. Ahora, con poco más de siete millones de pesetas, en "El huésped" el realizador recrea los últimos días de la Argelia colonial.

Bien distinta es la historia de Fernando Trullols (Barcelona, 1977), director de "Dos", su primer título en 35 mm. "éste es el primer festival en el que participo. Es un corto psicológico, la historia de una pareja en dos momentos de su vida. Un cuento que tiene mucho de mí", comenta el autor, que ha logrado sacar adelante su filme con tres millones y medio de pesetas. La misma cantidad que han gastado Santi Amodeo y Alberto Rodríguez en "Bancos", un corto muy especial, rodado en blanco y negro y en Cinemascope, "una técnica mucho más difícil a la hora de trabajar", cuenta Amodeo.

También las escuelas de cine están ya dando sus frutos y muchos de los alumnos de guión y dirección presentan sus primeros trabajos en Alcalá. Es el caso de Ramón Salazar (Málaga, 1973), que estrena en el Festival su primer corto, "Hongos", una historia sobre los ex novios que nunca desaparecen del todo. "Lo tuve que rodar en Betacam porque no tenía dinero, me costó un millón y medio de pesetas. Este verano vi que funcionaba y lo hinché a 35 mm".

Reparto excepcional

Rodado en clave de comedia, la película está protagonizada por Jaime Chávarri, Antonia San Juan y Enrique Alices. Un reparto excepcional para una opera prima. Con más medios han rodado sus películas Carlos Punyet ("Lisa") y Juan Cruz ("El olor de las manzanas"). La primera es un "thriller clásico", al menos así lo define Punyet (Madrid, 1959), admirador de Brian de Palma, a quien le gustaría rodar un largo del mismo género. "Lisa", protagonizado por Emilio Gutiérrez Caba, ha sido elegido en una primera selección realizada para optar a los Goya y para participar en el Festival Internacional de Cine de Bilbao. Juan Cruz (Barcelona, 1966) ha contado para "El olor de las manzanas" con Amparo Rivelles como única protagonista de excepción. La actriz da vida a Violeta, una mujer que ha de velar a su hermana inconsciente, a causa de un accidente casero, en un hospital.
Pero hay más películas y más directores en esta edición del Festival de Alcalá de Henares, títulos que seguro sonarán mucho más a partir de ahora. Como "Lalia", de Silvia Munt; "Abuelitos", de Francisco Plaza; "Equipaje abierto", de Javier Rebollo; "Los girasoles", otra historia animada de José y Manuel Lagares; o "Siete cafés por semana", de Juana Macías Alba.

Fuera ya de la sección oficial, la organización ha querido para este año hacer un repaso al último corto danés y al sexo en los cortometrajes, ademas de las jornadas en torno a la última década del corto español. En conjunto, un Festival fabricado para gustar a aficionados y especialistas, para agradar a un público heterogéneo y plural, un público que cada vez se interesa más por la producción anual de los cortometrajes.