Cine

El libro negro de Verhoeven

El autor de Desafío total vuelve a su tierra natal para rodar su próxima película

8 junio, 2006 02:00

Paul Verhoeven durante el rodaje de El libro negro

Tras seis años alejado de las pantallas, el director de origen holandés Paul Verhoeven ha vuelto a su tierra natal para rodar El libro negro, drama bélico y sensual sobre la ocupación nazi. En una visita al set de rodaje, El Cultural habló con el autor de Desafío total y Starship Troopers.

"No es lo que se dice una historia real pero sí basada en hechos reales y llevo preparándola los últimos 30 años", afirma un risueño Paul Verhoeven que se encuentra del mejor de los humores manejando un proyecto de 16 millones de euros, la película más cara de la historia de los Países Bajos. El libro negro es un thriller mezclado con elementos de drama bélico e historia sensual con el trasfondo de la invasión nazi que le ha devuelto casi a los orígenes de su carrera, donde dirigió películas como Delicias turcas o Soldados de Orange. "Es desde luego una historia que provoca muchas resonancias en mí dado que los últimos años de la ocupación los viví en La Haya. Viví cerca de donde estamos rodando y recuerdo perfectamente los bombardeos, los disparos y los cadáveres de civiles en las aceras. Se asesinaba a la ciudadanía masivamente simplemente si un oficial alemán había muerto. El derramamiento de sangre fue ingente".

El libro negro se centra sobre las peripecias de una joven artista de cabaret judía, Rachel Steinn, al final del año 1944. Tras comprobar cómo su familia es masacrada, se une a la Resistencia para descubrir quién traicionó a los suyos, aunque se convierte también en sospechosa de colaboracionista. Verhoeven asegura que el personaje ha sido inspirado por la adolescente Ana Frank, la joven de Amsterdam víctima del Holocausto, y también por el personaje real de una cantante judía cuya carrera se extinguió durante la ocupación nazi. "Creo que fueron aquellos hechos de los que fui testigo en mi infancia los que me proporcionaron una visión irónica de la violencia. Aunque se me acusa de rodar películas violentas, lo cierto es que tan sólo reflejo la violencia real de la sociedad. Es más, de joven me gradué en matemáticas y ciencias físicas en la universidad de Leiden, pero fueron los hechos de la guerra los que me provocaron ser director de cine".

De regreso a su patria, tras 22 años de ausencia y una carrera en Estados Unidos que ha incluido títulos como Desafío total, Robocop, Instinto Básico, Starship Troopers o The Hollow Man, el director afirma que la producción no es de corte hollywoodiense, aunque las sumas económicas y el número de extras resultan apabullantes. El equipo de producción publicó avisos en la ciudad imperial de La Haya y alrededores para buscar figurantes que portaran el uniforme de la Wehrmacht, pero para su sorpresa, fue complicado lograr el número de extras suficiente. El día de la visita de El Cultural, Verhoeven trataba de dirigir a 1.100 figurantes. "Recuerdo cuando en 1975 rodamos en las calles de La Haya, no lejos de este lugar, Soldados de Orange. También entonces pudimos palpar el rechazo que persiste todavía treinta años después. Como Rotterdam, fue una ciudad martirizada y los vestigios de aquellos sangrientos hechos todavía se pueden respirar en el aire".

Sin juicios
Asegura Verhoeven que el guión de Soeteman no juzga, "no hay héroes ni villanos, son todos personajes grises, ni blancos ni negros. Durante la guerra, vivían en La Haya hasta 140.000 judíos y al final quedaron tan sólo 30.000. Por otro lado, tras la rendición, se asesinó a muchos ‘traidores’ y murieron muchos inocentes... Gerard y yo hemos investigado estos hecho durante tres décadas. Y no descarto que volvamos a ser causa de controversia".

Producida a tres bandas por Reino Unido, la Babelsberg berlinesa y los Países Bajos, El libro negro se rueda en neerlandés, alemán, inglés y "efried". La protagonista absoluta es una joven actriz muy popular en su país, Carice van Houten, quien junto a Thom Hoffman rueda varias escenas de sexo que toda película de Verhoeven registra como marca de su casa. "Soy holandés y para el mí el sexo es algo natural y así lo muestro. Por otra parte, Carice es una actriz también liberada de prejuicios y perfecta colaboradora. Pero éste es un secreto que prefiero guardar". Para estas escenas siempre delicadas ha contado con el trabajo del director de fotografía Karl Walter Lindenlaub, que sustituyó en el último momento a Theo van de Sande.

Desde sus inicios como cineasta, con la serie televisiva Floris, protagonizada por Rutger Hauer, Paul Verhoeven siempre confesó querer hacer películas a gran escala. El libro negro responde a este deseo y también su siguiente proyecto, La bestia de Bataan. De nuevo, volverá la vista atrás a otro episodio cruel y sangriento de la II Guerra Mundial, acaecido en 1942. Fue "la marcha de la muerte de Bataan", en la que un militar japonés, el teniente general Masaharu Homma, masacró a cientos de prisioneros de guerra norteamericanos y filipinos.