Haneke junto a los protagonistas de Amour

Hasta ahora sólo lo habían logrado algunos nombres como Francis Ford Coppola, Emir Kusturica, Billie August, Shohei Imamura y los hermanos Dardenne. El bávaro Michael Haneke confirma los pronósticos y se suma al club de los elegidos consiguiendo su segunda Palma de Oro en Cannes (y además consecutiva) con Amour, un filme de temática devastadora y de formas más bien clásicas -quién se lo iba a decir hace algunos años a quien fuera el enfant terrible del cine europeo- que, no nos engañemos, no es una película austríaca o alemana, sino plenamente francesa: ahí están Jean-Louis Trintignant y Emmaneulle Riva para certificarlo.



El gran perdedor es Leos Carax, quien, visto lo visto con Haneke, probablemente tendrá que academizar su discurso si algún día quiere aspirar a triunfar en la Croisette. No han ganado la inventiva y la audiacia (lo de Carlos Reygadas, premio al Mejor Director, es pura impostura), no ha ganado la obra más visionaria del festival, pero no por ello hay que restarle méritos a la contundente y demoledora Amour, que representa en sí mismo un verdadero triunfo artístico y, sobre todo, una lección de humanidad por parte del cineasta del que menos podíamos esperar tal cosa.



El rumano Cristian Mungiu, poseedor de una Palma de Oro por 4 meses, 3 semanas y 2 días, también sale triunfador del palmarés que ha resuelto un sanedrín presidido por el italiano Nanni Moretti. La más que notable Beyond the Hills suma los premios al Mejor Guión y a la Mejor Actriz, que se lo han repartido sus dos protagonistas, Cristina Flutur y Cosmina Stratan, y que viene a reconocer una de las características y virtudes más destacables del llamado Nuevo Cine Rumano (aunque la etiqueta ya cansa), que no es otra que la sobresaliente calidad de sus interpretaciones.



No entraba en los pronósticos que Mateo Garrone obtuviera el favor del jurado con su Gran Premio, concedido a la fábula Reality, en torno a los efectos dementes de la celebridad mediática, mientras que el galardón al Mejor Actor -Mads Mikkelsen por The Hunt- premia lo único premiable en un película sobre un hombre acusado injustamente de pederastia con la que Thomas Vinterberg viola todas las reglas de la verosimilitud y apela al engaño, el golpe bajo y la trampa constante. El premio a Ken Loach por la inane, bobalicona The Angels' Share apenas viene a reforzar la cortedad de miras de un palmarés tan decepcionante como el grueso de las películas a competición.

PALMARES 65 FESTIVAL DE CANNES (2012)

Palma de Oro:

AMOUR, de Michael Haneke



Gran Premio del Jurado:

REALITY, de Matteo Garrone



Premio a la Mejor Dirección:

Carlos Reygadas por POST TENEBRAS LUX



Premio al Mejor Actor:

Mads Mikkelsen por THE HUNT



Premio a la Mejor Actriz:

Cristina Flutur y Cosmina Stratan por BEYOND THE HILLS, de Cristian Mungiu



Premio al Mejor Guión:

Cristian Mungiu por BEYOND THE HILLS



Premio del Jurado:

THE ANGELS' SHARE, de Ken Loach



Cámara de Oro a la Mejor Ópera Prima:

BEASTS OF THE SOUTHERN WILD, de Benh Zeitlin



Palma de Oro al Mejor Cortometraje:

SESSIZ-BE DENG, de L. Rezan Yesilbas