El formato del cine ha estallado, los directores lo saben, los actores lo saben, los espectadores lo saben. La industria no. Decía el otro día el outsider Gabriel Velázquez que hoy triunfa una película de cada 30. La hora y media o dos horas de toda la vida han menguado o aumentado favoreciendo la aparición de nuevos géneros y posibilidades. De la misma manera que se han puesto de moda las cartas fílmicas entre directores, otro cine de calidad ha tomado forma en la televisión a través de esas películas de horas y horas que son las nuevas series. El cortometraje, tan poco tomado en serio hasta la fecha, obrará un papel fundamental en el futuro, ya lo hace en realidad. Pero con estos cambios, la piratería y la infinidad de canales y ventanas de distribución el corto vive en una algarabía.



¿Sobran festivales? ¿Son lo bastante serios? ¿Funcionan bien las subvenciones? ¿Se dan las suficientes en este formato? ¿Es fácil el acceso para el público? Para hablar de todos estos temas nació el pasado 14 de febrero el Visor del Cortometraje, una iniciativa de los profesionales con carácter abierto a los aficionados. Su objetivo es "buscar el bien común para el sector", comenta su creador, el director Edu Cardoso, responsable también del programa Cine Corto de Radio Círculo. La sede del debate no es otra que la Cineteca del Matadero, que por otro lado, justo ahora que llega el verano ha suspendido su programación hasta septiembre. Todo apunta a que a su vuelta no dedicará su programación exclusivamente al documental.



La propuesta ya ha empezado a dar frutos. En la siguiente reunión, que se celebra hoy, se realizará un ránking de festivales de acuerdo a un listado de buenas prácticas acordado entre los participantes porque, recuerda Cardoso, muchas de estas citas adolecen de una falta total de criterio y con frecuencia abusan de las ganas de los creadores de darse a conocer. Así, estudiarán si en las bases de los festivales aparecen aspectos como el pago por proyección, si se favorece la inscripción online o se obliga a ceder los derechos de los cortos fuera del evento, etcétera y se dará una puntuación a cada festival dependiendo de estos criterios. Igualmente, en su web ya puede leerse un decálogo de recomendaciones para certámenes.





En el futuro, el Visor del Cortometraje, por el que han pasado realizadores, productores e incluso los propios directores de algunos de los festivales que hoy se pondrán en tela de juicio, creará también un Centro de Recursos sobre el que ya se está trabajando y que pretenden convertir en un centro de referencia para el sector. Entre sus contenidos se propone favorecer el trueque y compartir información, así como un espacio para la defensa del cortometraje.