¿Qué sería de Dalí si apareciera en el siglo XXI? ¿Cómo habría aprovechado las posibilidades de YouTube? ¿Se habría hecho famoso? En torno a estas preguntas gira la historia del peculiar proyecto transmedia Dating Dalí. Para los profanos en la materia, transmedia hace referencia a una narración que se despliega en varios medios o formatos. En el caso de Dating Dalí, la historia comienza como una webserie y finaliza como una novela. "La idea era utilizar el formato Premium de las aplicaciones móviles en el que una parte del contenido se ofrece de manera gratuita y si quieres continuar la experiencia tienes que pagar", explica Alonso Laporta, director y guionista de la serie (gratuita) y autor de la novela (de pago).



La serie consta de ocho episodios de cinco minutos cada uno que se pueden ver al completo en la web del proyecto (www.datingdali.es) y ha sido rodada entre Madrid y Cantabria en localizaciones como el Museo del Ferrocarril de Madrid. La historia arranca en España en el año 1929 cuando el joven Salvador Dalí, un artista reprimido y raro que pinta retratos de su hermana Ana María y discute sobre poesía con Federico García Lorca, se dispone a rodar su primera película surrealista. Pero todo se complica cuando el tren que debía llevarle a París le traslada inexplicablemente al siglo XXI. "Siempre me ha interesado la figura de Dalí y se me ocurrió jugar con la idea de como habría aprovechado internet, las redes sociales o Youtube ya que toda su vida estuvo buscando presencia mediática", explica Laporta. A partir de este peculiar viaje en el tiempo, el genio de Figueras se verá metido en una aventura para volver a su época, salpicada con buenas dosis de comedia romántica.



Acabada la serie, la historia continua en una novela. En esta segunda parte, Dalí viaja al norte de España tras ser contratado en el Proyecto Endorfina: un misterioso programa de neurocientíficos y artistas que investigan los circuitos del placer en el cerebro. "La ventaja de la novela", explica el autor, "es que no tienes límite de presupuesto ni de actores ni de personajes y por tanto podía introducir más aventuras e ideas que no cabían en la serie".



Tanto para Alonso Laporta como para Gon Alonso (que interpreta a Dalí) el proyecto ha sido un salto al vacío. Ambos dejaron sus trabajos, en el mundo jurídico y de la aviación respectivamente, para afrontar el desafío de convertirse en emprendedores culturales. Para ello, montaron la productora-editorial independiente ChapterScene. "Había que lanzarse de golpe y probar suerte", comenta Laporta. "Siempre nos había interesado la literatura, el arte, la ficción... Era algo vocacional". Su primer proyecto y carta de presentación es este Dating Dalí para el que en gran medida, han tenido que aprender por su propia cuenta muchos de los aspectos del negocio y de la creación. "Yo no tenia formación como director pero hoy en día internet lo facilita todo mucho". Ahora toca lo más difícil, afianzarse el complicado mercado cultural.