Mikel Olaciregui
Mikel Olaciregui y Vicente Mozo renuncian a continuar en la dirección artística de DocumentaMadrid asegurando que "las condiciones ofrecidas por Madrid Destino no les permiten garantizar el buen resultado del Festival".
Olaciregui y Mozo, además de la dirección de DocumentaMadrid, eran los responsables de gestionar Cineteca, sala de cine de Matadero y sede del festival de documentales, hasta el pasado 30 de septiembre cuando expiró su contrato. A mediados de octubre el consistorio madrileño designó a Lola Salvador como sustituta de ambos, con la función añadida de liderar el nuevo plan de apoyo al sector audiovisual, provisto de 1,2 millones de euros para 2017. Por lo visto, la gestión que Olaciregui y Mozo habían desarrollado hasta ese momento no encajaba con los nuevos planes del Área de Cultura del Ayuntamiento.
Sin embargo, desde el ayuntamiento sí habían mostrado interés en que el antiguo director del Festival de San Sebastián y su socio se mantuvieran al frente de DocumentaMadrid. Tras las conversaciones mantenidas con Madrid Destino en lo que ha gestión se refiere, ambos han decidido declinar la propuesta porque no se dan las condiciones adecuadas. "El proceso ha sido pacífico y muy cortés, incluso hubo entendimiento entre las partes cuando Lola Salvador se hizo cargo de la política cinematográfica de Madrid", ha explicado Olaciregui a nuestro compañero Carlos Reviriego. "La idea, según nos anunciaron, es que iba a haber una mayor participación del Ayuntamiento en el cine de la ciudad y me pidieron que siguiera dirigiendo DocumentaMadrid, incluso dotándolo de mayor presupuesto".
Las diferencias emergieron a la superficie cuando Olaciregui entendió que no podría seguir trabajando con los colaboradores que le habían ayudado en su andadura al frente de Documenta en los últimos años. "Mi equipo de Cineteca se ha ido desmantelando poco a poco, y en la última reunión que tuvimos con Madrid Destino quedó claro que yo no iba a poder trabajar con mi equipo de colaboradores, los que han hecho el trabajo estos cuatro años", explica Olaciregui. "Para mí no era admisible tener que empezar de cero, formar un nuevo equipo que no es de mi confianza, por cuestiones de burocracia, pues esos eran los pretextos. No lo entiendo muy bien, porque Madrid Destino también contrataba a mi equipo hace un año, pero ahora parece que Madrid Destino tiene otras normas de contratación".
En el plan del ayuntamiento de Madrid anunciado en octubre se destacaba una mayor proyección de Documenta Madrid, que se reforzará y ampliará gracias a un 30 por ciento más de presupuesto que pasaba de 228.000 euros a 300.000 euros. Sin embargo este aumento no ha sido suficiente reclamo para que Olaciregui y Mozo continuaran gestionando el festival. "El desencuentro ha sido por las condiciones de trabajo, no por el presupuesto o por la filosofía de programación del festival, lo cual me da mucha lástima porque obedece a razones internas difícilmente comprensibles para el ciudadano", añade Olaciregui.
Tanto Mikel Olaciregui y Vicente Mozo como el resto del equipo de Cineteca y DocumentaMadrid despiden estos cuatro intensos años de programación con la tristeza de abandonar un proyecto en el que han creído firmemente y la certeza de que el trabajo realizado ha merecido la pena. "La programación de Cineteca la hemos dejado cerrada hasta diciembre", ha afirmado el antiguo director. "A partir de enero, todo lo que se vea en sus salas será responsabilidad de los nuevos programadores, liderados por Lola Salvador y Javier Corcuera". Todo el equipo espera y desea que el nuevo rumbo emprendido desde el Ayuntamiento contribuya a mantener y potenciar ambas marcas (Cineteca y DocumentaMadrid), que han posicionado Madrid al frente de las programaciones de vanguardia en el panorama cinematográfico internacional.