Una imagen de Carla Simón
La película de Carla Simón se ha impuesto a Abracadabra y 1989. Los últimos de Filipinas en la votación de los académicos para representar a España en los Oscar.
Verano 1993 es la historia de Frida, una niña de seis años que afronta el primer verano de su vida con su nueva familia adoptiva, tras la muerte de su madre a causa del VIH. Rodada en catalán, está protagonizada por las pequeñas Laia Artigas y Paula Robles y por Bruna Cusí y David Verdaguer.
Repleta de sutileza y verdad, el filme ofrece una crónica íntima, inspirada en la infancia de la directora, que ha seducido por su sinceridad y por explorar, con un ritmo preciso e intuitivo, la belleza de un pasado empapado en duelo. "Es mi historia pero cuando vives una cosa a una edad tan temprana se acaba convirtiendo en algo parecido a un cuento o una leyenda aunque no lo hayas vivido tú", explicaba Simón a El Cultural en una entrevista realizada por el estreno de la pelicula en pasado 30 de junio. "En mi memoria se mezcla todo y me resulta muy difícil decir cómo fue exactamente. Parto de recuerdos e imágenes para darle una estructura de película".
La película de Carla Simón se ha impuesto a Abracadabra, de Pablo Berger, y 1989. Los últimos de Filipinas, de Salvador Calvo. Estos tres títulos fueron seleccionados entre los 42 largometrajes estrenados entre el 1 de octubre de 2016 y el 30 de sptiembre de 2017. Ahora el filme tendrá que superar una primera preselección si quiere llegar a la alfombra roja de los Oscar, algo que no logra ningún representante español desde que Alejandro Amenábar se llevara el premio en 2004.