Un momento de Naked Spaces, de Trinh Minh-ha
Pamplona vuelve a convertirse, entre el 5 y el 10 de marzo, en el centro mundial del cine documental. Durante seis días tendrá lugar la nueva edición de Punto de Vista, el Festival Internacional de Cine Documental de Navarra, en el que los creadores ofrecen sus maneras de captar la realidad, sus puntos de vista independientes y novedosos, muchas veces de manera rompedora y vanguardista. Punto de Vista es, en palabras de Garbiñe Ortega, que asume este año por primera vez la dirección artística del festival, "un lugar para la reflexión y la exhibición de propuestas con una fuerte identidad mixta e híbrida".Punto de Vista se define como un punto de encuentro a varios niveles. En primer lugar, es un lugar donde los espectadores, los cineastas y los teóricos de todo el mundo comparten sus concepciones y opiniones acerca de las manifestaciones artísticas en torno a la no-ficción, centradas evidentemente en el documental. En la Sección Oficial compiten 21 documentales de 14 nacionalidades diferentes (España, Brasil, India, Estados Unidos, Reino Unido, Chile, Canadá, Francia, Italia, Alemania, Líbano, Qatar, Letonia y Portugal), un buen ejemplo de la amplia representación internacional que refleja este carácter de punto de encuentro. En este sentido, encontramos también la presencia invitada de la documentalista vietnamita Trinh T. Mihn-ha, que, además de dar una conferencia, presentará su último libro y proyectará tres de sus películas, como Naked Spaces.
Además, pretende ser un lugar donde contacten el pasado y el presente del documental. Como todo buen festival, Punto de Vista tiene también un propósito didáctico y reivindicativo: quiere ayudar al público a conocer los clásicos y las grandes figuras del documental (y para eso cuenta con la sección Retrospectivas).
Este año, además, este encuentro temporal se da también a partir de la sección Correspondencias, que intenta establecer un diálogo entre una selección de obras de ayer y de hoy, del pasado y del presente. Los grandes cineastas del pasado "dialogan", así, con los actuales a través de sus obras sin una continuidad lineal cronológica ordenada, y ese diálogo nos permite acceder de una manera nueva y original a la historia del cine, una historia no contada hasta ahora. Las películas confrontadas, seleccionadas por Garbiñe Ortega y Francisco Algarín, "siempre estuvieron separadas pero, una vez reunidas, parecen haber estado destinadas a acabar juntas", en palabras de Ortega.
La sección estará acompañada de la publicación Correspondencias, cartas como películas, una colección de cartas inesperadas, que revelan amistades secretas (Louis Lumière y George Mèlies), colaboraciones desconocidas (Orson Welles y Robert J. Flaherty) o proyectos que no podríamos conocer sin estas cartas (una propuesta de Pasolini a Jacques Tati para colaborar, por ejemplo).
Compromiso y ruptura
El segundo elemento de identidad de Punto de Vista es su carácter vanguardista. Desde sus orígenes, el festival ha defendido y estimulado que los artistas se adentren en caminos intransitados y desconocidos, que se abran paso en el mundo del documental con aproximaciones rompedoras y totalmente originales, que se atrevan a ir más allá de lo acostumbrado, saliéndose de los esquemas típicos para ofrecer su visión personal y éticamente comprometida de la realidad que les rodea.Ortega señala que el festival persigue demostrar que "existe un cine muy consciente, que se cuestiona qué mirar y desde dónde, con una fuerza que golpea y emociona a partes iguales", un cine "reflexivo y palpitante que empuja los límites formales a la vez que exige el respeto y la dignidad de la experiencia humana". El documental de no-ficción es, de hecho, un género privilegiado para ello, porque permite mostrar la realidad a través de una perspectiva puramente humana, más cercana que lo que la ficción podría permitir.
Este criterio ha sido fundamental a la hora de escoger los documentales presentes en el festival. "La programación quiere apostar por la pluralidad y heterogeneidad desde la reivindicación de tres cualidades: lo vivo, lo híbrido y lo común", afirma la directora. Se exige una búsqueda y una investigación, la exploración formal y estética sin abandonar el componente social, "repensar las formas de lo real desde la complejidad del presente".
La Sección Oficial recoge las creaciones que competirán por los distintos premios, obras sobre los problemas, desequilibrios e inestabilidades sociales, reflexiones acerca del papel del arte en la sociedad, el extrañamiento ante la naturaleza, los movimientos migratorios y su relación con la identidad territorial, los anhelos revolucionarios, las relaciones humanas, el paso del tiempo… Por primera vez, dos películas de cineastas navarras se presentan en esta sección para competir: Young and beautiful, de Marina Lameiro, y Yours Truly, codirigida por Maddi Barber. Las 21 películas han sido seleccionadas por su valor estético y su aportación formal en el campo del documental experimental, creaciones que no se alejan de lo real y lo contemporáneo, pero que tampoco renuncian a lo poético y se esfuerzan por ofrecer un nuevo punto de vista.
Entre las novedades de esta edición del festival encontramos la sección Dokbizia, un encuentro de cineastas, artistas visuales, escritores y performers que busca abrir la puerta a discursos de otros ámbitos, crear puentes interdisciplinares para intercambiar, reflexionar y vivir lo real desde varios ángulos. Cada año tendrá un tema central, y esta edición se centrará en poner en relación el cuerpo con la imagen en movimiento distintas políticas y estéticas en las que éste sea el medio de alcanzar lo real. Además, este año estrenan una nueva línea de programación con laboratorios de formación y creación dirigidos a nuevos cineastas, e intentarán acercarse al público familiar mediante una programación educativa dirigida al público infantil y juvenil.
Por último, este 2018 es el 50° aniversario de las revoluciones del 68, y desde Punto de Vista no han querido faltar a los homenajes y reflexiones con este motivo. Para ello, se presenta una nueva sección, Nuevas resistencias post 68, que programa un ciclo de películas "muy necesarias, que luchan contra el cinismo desidioso y la credulidad paralizante, con las manos, con las voces quebradas, con los cuerpos, con el alma". Sin embargo, esta sección no pretende ser una retrospectiva, sino un "contrapunto para pensar en este intenso ahora, en esta revolución que necesita desprenderse de la carga histórica sesentaiochista para instaurar nuevos lenguajes de protesta y de resistencia".