Fernando Colomo (derecha) en el rodaje con Paco León. Foto: José Haro

Con una larga trayectoria a sus espaldas, Fernando Colomo (Madrid, 1946) siempre ha sido un amante de la comedia y películas tan populares como Tigres de papel (1977), Bajarse al moro (1989), El efecto mariposa (1995) o la más reciente La banda Picasso (2012) dan buena fe de ello. Ahora el director regresa a las pantallas con La tribu, en la que se inspira en una historia real para contarnos un relato de superación, equívocos y mucha música. La película se inspira en Las Mamis, un grupo de mujeres de Badalona que triunfó en los talent shows televisivos con sus coreografías estilo "urban" al ritmo de hip hop y r&b. Mujeres luchadores que encontraron a través del baile una inspiración y una comunidad afectiva que en el filme están lideradas por Carmen Machi, una mujer que tuvo que abandonar a su bebé cuando era una adolescente y que cuando vuelve a verlo, éste ya en la treintena, se encuentra con que acaba de perder la memoria. El hijo perdido es Paco León, un chico que creció en una familia de la parte alta de Barcelona y que acaba de ser despedido de su puesto como alto ejecutivo después de protagonizar un embarazoso vídeo de YouTube. No solo eso, además lo odian en todo el barrio de su madre biológica porque como ex director de recursos humanos firmó los masivos despidos de una multinacional. Con estos mimbres, Colomo construye una fábula de ambiente obrero y luchador.



Pregunta.- ¿Pretende con esta película animar a todo el mundo a que se apunte a clases de baile y crear un movimiento social?

Respuesta.- La verdad es que no lo había pensado pero yo pienso que sí, que podría haber ese movimiento social, todo dependerá de la difusión de la película. Ojalá la gente se apunte a las academias de baile porque es una terapia estupenda. Hay que hacerlo con una cierta constancia y tomárselo pero afirmo, porque lo he probado personalmente, que es muy sanadora. Cualquier cosa que tenga música siempre será buena para los seres humanos y bailar va muy bien para liberar tensiones.



P.- No solo es el baile, en la película el grupo también se convierte en una verdadera comunidad solidaria. ¿Bailar sirve para crear lazos en esta sociedad cada vez más solitaria?

R.- Dicen las estadísticas que los casados viven más años que los solteros... Salta a la vista que vivimos en una sociedad cada vez más individual en la que el gran el enemigo es el sofá porque es muy fácil aislarte con la cantidad de formas de distracción que ofrece el mundo moderno. Lo ves con el grupo de Las Mamis, ellas te cuentan que no fallan nunca a sus dos reuniones semanales porque además de lo positivo que es el ejercicio sobre todo lo fundamental son las cervezas de después. La familia a veces puede tener un lado más siniestro pero este tipo de lazos son muy beneficiosos, ves cómo se ayudan entre ellas.



P.- A pesar del tono de comedia, también vemos que son mujeres que han pasado pruebas duras. ¿No hay buena comedia sin algo de drama?

R.- Todo está basado en personajes reales. Nos gusta la imagen de estas mujeres bailando ya que además lo hacen bien aunque quizá nadie se lo espera. Nos contaron sus vidas y habían tenido vidas bastante duras. La forma en que lo habían superado fue lo que nos animó a hacer la película. Son como una piña. Ayer mismo estuve con ellas y son estupendas. Se ha creado un vínculo muy fuerte entre la película y ellas.



P.- Hablemos del personaje de Paco León, es la historia de pijo caído en desgracia que gana por su corazón, lo hemos visto en novelas y películas Capitanes intrépidos de Kipling o incluso en El príncipe y el mendigo, de Mark Twain. ¿Qué referentes tenía?

R.- Estos personajes fuera de lugar que solo así logran descubrir su identidad son un clásico. Cuando él comienza a relacionarse con gente muy alejada de lo que ha sido su vida como Las Mamis descubre un mundo nuevo. La película tiene algo de cuento moral porque cuando se mezcla con los trabajadores que ha puteado como ejecutivo cambia totalmente su perspectiva. Ese mundo le choca pero también le hace mejor persona.



P.- Un detalle curioso es que los hermanos ignotos de León, a los que él mismo echó a la calle sin saber que eran sus hermanos, son unos vagos. ¿Quería alejarse de tópicos maniqueos?

R.- Aunque haya algo de eso, no es una película abiertamente reivindicativa, no es el cine de Ken Loach. Nos hacía gracia que fueran víctimas de ese ERE pero que también sean unos jetas que explotan a su madre. Es bastante frecuente ver a esos jóvenes que viven en una especie de limbo y que se acaban convirtiendo en unos parásitos.



P.- Los que salen peor parados son los de la tele, ¿quiere decirnos algo con esos malvados?

R.- Jaja. Está claro que son los malos. El contraste con las Mamis es bastante bueno.







@juansarda