Imagen de la película Trauma (2017), de Lucio A. Rojas

Prohibir. Si nos prohíben algo somos muchos los que nos sentimos aún más tentados, si cabe, de hacer o ver eso que nos han negado. Ha ocurrido recientemente con Fariña, que rápidamente se ha colado en la listas de los libros más vendidos. Y algo similar pasa con algunas películas como Saw V. La VI Muestra de Cine Lo + Prohibido reúne en la sala de cine madrileña Artistic Metropol, del 9 al 12 de agosto, una selección de títulos políticamente incorrectos. "Desde la primera edición el festival ha estado compuesto por películas que han tenido problemas con la censura", cuenta Ángel Mora, director del evento. Algunas no han pasado el filtro por la violencia o por abordar temas políticos, religiosos o sexuales.



El 90% de las películas que se muestran estos días en Madrid está fuera del recorrido comercial y esto puede ser un reclamo para quienes aún siguen en la capital. Pero no siempre pueden programar las películas que quieren. Es el caso de El crimen de Cuenca, una película dirigida por Pilar Miró en 1979, que "estuvo dos años secuestrada porque consideraban que la película hacía apología no grata de la Guardia Civil", recuerda Mora. Por temas de derechos, no obstante, no han podido programarla en ninguna de las seis ediciones de vida de esta muestra de cine prohibido.



Mora hace hincapié en que "no podemos asociar lo prohibido con el terror ya que el primero engloba todo tipo de géneros". Cree que en términos de libertad de expresión estamos retrocediendo y que chistes como los de Arévalo no se podrían hacer hoy porque diferentes colectivos arremeterían contra él. "En el cine ocurre algo similar", sostiene. Y recuerda cómo el director de El exorcista, William Friedkin, dijo que actualmente "no podría rodar la escena de la niña masturbándose con el crucifijo porque las asociaciones católicas se le echarían encima".



Fotograma del corto Chicamán (2017), de Ángel M. Saló

Sin embargo, asegura que en España somos unos privilegiados. No hay más que mirar a China, por ejemplo, que acaba de censurar la película de Winnie the Pooh por el parecido del osito con su presidente. El censor, añade, "tiene el objetivo de que nadie pueda ver determinada película pero cuanto más lo prohíben, más seduce, sobre todo si no se justifica bien". En esta ocasión, la muestra se expande y ha introducido cortos eróticos realizados por gente del mundo artístico pero no necesariamente directores de cine como Jaime Chávarri o Sánchez Dragó. Con todo, en esta edición se "toman la libertad de programar cinco películas que no han tenido problemas con la censura".



Películas inéditas y grandes clásicos

Entre las cinco propuestas internacionales de habla hispana más extremas se encuentra la cinta más controvertida del cine chileno y que abrirá la muestra: Trauma (2017), de Lucio A. Rojas. Una suerte de rape & revenge que ha levantado ampollas en los lugares en los que se ha mostrado y muy especialmente en el Festival de Cannes, donde el público quedó en estado de shock tras la proyección. Atroz (2015), de Lex Ortega, cuenta con el título honorífico de ser "la cinta más violenta de la historia del cine mexicano" y en la que seguimos los actos más depravados de dos asesinos seriales a los cuales la policía les ha incautado las cintas que filmaban a sus víctimas. Como particularidad, la película es presentada por Ruggero Deodato, director de la célebre Holocausto Caníbal.



El terror y lo fantástico se unen para atormentar a los protagonistas en forma de leyenda en la producción nacional La Dama del Bosque Maldito (2018), película dirigida por George Karja. También es española la cinta La Cosecha (2014) título de Roberto Santiago que optará al premio del público. Se trata de un filme rodado en formato found-foutage que une elementos de comedia y terror y homenajea a una muy célebre saga de ciencia ficción. Para cerrar el apartado del premio del público se mostrará Animal (2015), del argentino Fernando Balihaut, que estará presente en la proyección y presentará su película, una provocadora cinta que ganó el premio Biznaga de Plata en el Festival de Málaga, donde también dejó al público helado.



Robert Mitchum en La noche del cazador (1955), de Charles Laughton

Fuera de competición el resto de la programación se compone de Yo, Christina F (1981), una película de Uli Edel basado en la novela de Kai Hermann y Horst Rieck, donde veremos a una joven de catorce años prostituyéndose para poder pagar su adicción a la heroína. La española La Raíz del Mal (2008), de Adrián Cardona director también del cortometraje de culto Brutal Relax, ofrecerá un festival de gore extremo para los paladares más exquisitos en la materia. Una de las piezas que todo cazador de rarezas no debería dejar escapar es American Guinea Pig: Bouquet of Guts and Gore (2014), la continuación estadounidense de la serie de films pseudo-snuff Guinea Pig dirigida por Stephen Biro.



En la misma línea de crudeza se proyectará por primera vez en pantalla grande en España The Bunny Game, un demoledor e innovador producto de Adam Rehmeier que nos presenta un tortuoso juego en el que una prostituta cocainómana de Hollywood es secuestrada durante cinco días por un maniático camionero. Por otro lado, el bíptico del maestro Jesús Franco La Cripta de las Condenadas (2012), que se proyectará en dos partes, el cortometraje seleccionado para los Goya Tio Jess (2012) de Víctor Vatellano y Hugo Stuven, que acaba de estrenar Solo, que muestra los conflictos en pleno rodaje de una de las últimas películas del propio Franco y el cortometraje transgresor Abashed de Jessica González, que estará presente en el pase.



También podrán verse una serie de clásicos como L'ultimo squalo a.k.a. Tiburón 3 (1981), de Enzo G. Castellari, la sharkploitation italiana que fue prohibida por tratarse de una secuela bastarda de la saga oficial de Spielberg. La cinta se exhibirá en programa doble junto al documental ¡Zarpazos! Un Viaje por el Spanish Horror (2013), una cinta de Víctor Matellano que repasa los mejores años del fantaterror español. El cineasta colmenareño presentará su documental y dará datos de lo más interesantes de la película de Castellari. También se podrá ver uno de los grandes clásicos polémicos como La Noche del Cazador (1955), de Charles Laughton con Robert Mitchum. Se trata de un drama perverso e inquietante que se encuentra entre las mejores películas de la historia del cine.



Otro clásico, aunque de otra tesitura, es El Destripador de Nueva York (1982), un filme en el que el director italiano Lucio Fulci se ganó la fama de misógino. Sin salir de los ochenta, también se podrá ver Henry, Retrato de un asesino (1986), una oscura cinta filmada por de John McNaughton y con Michael Rooker que explora la psique de un despiadado asesino que sale de prisión tras asesinar a cuchilladas a su madre. Y no podía faltar en este apartado el principal exponente de la conocida como "Nueva Carne"; Vinieron de dentro de... (1975) es una de las primeras y más enfermizas películas de David Cronenberg. Como clausura de la sección clásicos se podrá ver un título noventero del cine independiente más duro; Kids (1995). En ella, Larry Clark narra las controvertidas vivencias, en clave semi-documental, de un grupo de adolescentes que se drogan y mantienen relaciones sexuales con el fantasma del SIDA planeando sobre sus cabezas. Un cruel relato de la vida en las calles de la época.



@scamarzana