Autores consagrados, jóvenes valores y veteranos iconoclastas se darán cita en Sevilla desde este viernes al 16 de noviembre convirtiendo la capital andaluza en punto de encuentro del cine de calidad y de autor que contará con más presencias que nunca: Robert Guédiguian, Lorenzo Matotti, Elia Suleiman, Pietro Marcello, Albert Serra, Rodrigo Sorogoyen, Eloy Enciso o Mark Cousins son sólo algunos de los nombres que desfilarán por las salas. Grandes cineastas a los que el público tendrá la oportunidad de conocer de primera mano en un festival abierto y participativo.
Una edición vibrante y rica en contenidos que refleja la diversidad cultural de Europa, y que llevará a Sevilla 230 títulos, desterrando las etiquetas asociadas a la producción europea. Referente del cine de vanguardia y comprometido militante político, Pere Portabella recibirá el Giraldillo de Honor que reconoce su trayectoria como productor y director. Y una de las musas del cine francés actual, Jeanne Balibar, será homenajeada con el Premio Ciudad de Sevilla. Esta edición pondrá también el foco en dos importantes directoras europeas, Joanna Hogg y Lene Berg, mostrando una retrospectiva de sus trabajos, en su mayoría estrenos en España. Ciclos con películas inéditas y sorprendentes, “melodías excéntricas” y la mejor animación...
Las 18 películas seleccionadas en la Sección Oficial a concurso de la 16ª edición el Festival de Sevilla dan cuenta de la potencia creativa y libre de prejuicios del nuevo cine europeo. José Luis Cienfuegos, director del Festival, presenta la selección como “una invitación a que los públicos acudan a la sala a disfrutar de una experiencia colectiva y enriquecedora” en una edición que viene a desterrar las etiquetas asociadas a la producción europea. “Hemos seleccionado películas que remiten a una gran variedad de temáticas y estilos. Que pueden conmovernos, hacernos reír, impactarnos y, sobre todo, lograr que disfrutemos en la sala”, ejemplifica Cienfuegos. Y añade: “Es en su variedad y frescura donde encontramos la mejor manera de definir al cine europeo actual”.
El regreso de Sorogoyen con Madre -tras el rotundo éxito de El reino con Goya al Mejor Director y al Mejor Guion Original-, se configura como un thriller psicológico basado en el cortometraje homónimo que le valió la nominación al Óscar en 2019. Protagonizada por Marta Nieto (quien acaba de recibir el Premio a la Mejor Actriz en Venecia), acompañada en el reparto por Àlex Brendemühl y Jules Porier, y escrita junto a su coguionista habitual, Isabel Peña, Madre afronta un relato de ausencias, desplazamientos y esperanzas ante la posibilidad de recuperar lo más querido.
Nombre mimado en Cannes, Elia Suleiman presentará It Must Be Heaven, historia en clave de comedia en la que él mismo se embarca en un periplo de París a Nueva York a la caza de financiación para su próxima película y que recibió una de las mayores ovaciones en Cannes y la Mención Especial del Jurado. También elige París como escenario la ganadora del Oso de Oro en la Berlinale, Sinónimos, de Nadav Lapid. En esta ocasión, el director, anteriormente premiado con el Giraldillo de Plata en Sevilla por La profesora de parvulario, reflexiona sobre la búsqueda de un lugar en el mundo a través de la peripecia de un israelí que renace con lo puesto a una nueva vida en la que decide renegar de sus raíces hebreas.
Con Dios existe, su nombre es Petrunya, de Teona Strugar Mitevska, el espectador viajará a un pueblo de Los Balcanes, donde un sacerdote heterodoxo arroja una cruz al río: el hombre que sea capaz de encontrarla, tendrá suerte todo el año. Solo que la afortunada, para enfado de sus competidores, es una treintañera con estudios superiores y en paro. Por otro lado, el cine de género llega a la Sección Oficial de la mano del director rumano Corneliu Porumboiu y La Gomera, un relato noir que sigue la historia de un policía corrupto que viaja a la isla española para aprender el silbo canario, un lenguaje que utilizará para comunicarse con la mafia.
De la francesa Justine Triet se exhibirá Sibyl, sobre una psicoanalista que regresa a su vocación primera, la escritura. Adèle Exarchopoulos interpreta a una actriz desesperada cuya vida es, a ojos de la terapeuta, maná para la literatura, razón suficiente para que se decida a tratarla. Recién llegada de su triunfo en Venecia, donde se ha alzado con el premio a la Mejor Película de la Sección Orizzonti, llega la distópica Atlantis, de Valentyn Vasyanovych, el responsable de la fotografía de la magnífica The Tribe. La trama transcurre en un futuro cercano en el que una Ucrania devastada y sin recursos ecológicos debe reconstruirse después de una guerra con Rusia.
La Sección Oficial del Festival vuelve a apostar además por una cinta de animación. Se trata de La famosa invasión de los osos en Sicilia, el debut como cineasta del maestro de la ilustración y el cómic Lorenzo Mattotti, ganador de un Premio Eisner y portadista de publicaciones como The New Yorker.
Además, competirán por el Giraldillo de Oro cuatro nuevos clásicos de la dirección europea. Por un lado, Jessica Hausner da un sorprendente giro a su filmografía con Little Joe, la historia de una bióloga que, tras crear en laboratorio una planta que proporciona la felicidad a su dueño, se la lleva a casa como regalo para su hijo. Abel Ferrara estará en la Sección Oficial con Tommaso, relato con el que pone en imágenes las obsesiones y ansiedades de un cineasta americano en Roma. Robert Guédiguian retrata los nuevos conflictos laborales y retoma los temas clave de su obra en Gloria Mundi, que consiguió en Venecia el Premio a la Mejor Actriz para su musa Ariane Ascaride. Y Pietro Marcello adapta la novela Martin Eden, de Jack London, una monumental obra sobre el ascenso social de un joven marinero que quiere ser escritor.
También habrá cuatro miradas hacia nuestra historia. Albert Serra viaja en Liberté a los años previos a la Revolución Francesa para retratar el vicio y el sexo de un grupo de libertinos que tratan de exportar a Alemania su filosofía basada en el rechazo de la moral y la autoridad. Eloy Enciso narra en Longa Noite recuerdos de la represión franquista a partir del retorno de Anxo a su pueblo natal en Galicia, tras la Guerra Civil. Marco Bellocchio bucea en El traidor en la historia de Tommaso Buscetta, el primer jefe de la mafia siciliana convertido en pentito –exmiembros de organizaciones criminales que, tras abandonarlas, colaboran con la justicia–. Y Bruno Dumont presenta Juana de Arco, continuación de Jeannette: La infancia de Juana de Arco (2017), en la que adapta las últimas partes de Domrémy, obra del escritor Charles Péguy.
El autor sueco Roy Andersson, mostró en premier mundial cerca de 30 minutos de About Endlessness, durante el homenaje que el Festival de Sevilla le brindó la pasada edición. La película, que recibió el León de Plata a la Mejor Dirección en Venecia y que se inspira en Las mil y una noches, es una hipnótica comedia de regusto amargo que explora el absurdo de la sociedad, a través de una sucesión de escenas yuxtapuestas de las distintas fases del ser humano. Por último, Technoboss, una comedia con incursiones en el musical con del cineasta portugués Joao Nicolau tratará de llevarse el gato al agua tras concursar en Locarno.