El director de cine británico Alan Parker ha muerto a los 76 años tras haber padecido "una larga enfermedad", según ha informado una portavoz mediante un comunicado en nombre de la familia del cineasta. Parker dirigió clásicos del cine como El expreso de medianoche, Fama y Evita. Sus películas han obtenido numerosos galardones, entre ellos 19 premios BAFTA, 10 Globos de Oro y 10 Óscar. Él obtuvo dos nominaciones al Óscar al mejor director.
Parker, nacido en el seno de una familia trabajadora en Islington, al norte de Londres, no tuvo una especial vocación cinéfila durante su infancia. A los 18 años dejó los estudios para trabajar en el mundo de la publicidad y ese fue el comienzo de una trayectoria profesional que le fue acercando al séptimo arte. Fue redactor de anuncios y trabajó en varias agencias publicitarias. En una de ellas conoció a David Puttnam y Alan Marshall, que luego serían productores de muchas de sus películas. Puttnam lo impulsó a escribir su primer guión cinematográfico, Melody, en 1971.
Parker filmó su primera película como director en 1973. Se llamó No Hard Feelings y también escribió el guión. Es una historia de amor ambientada en el bombardeo de Londres durante la Segunda Guerra Mundial por parte de los nazis, que duró 57 noches. Financiada por él mismo poniendo en juego sus ahorros y hasta su casa, la BBC terminó comprando la película y más tarde lo contrató para dirigir otra película ambientada en la Segunda Guerra Mundial. Titulada The Evacuees (1975), la cinta ganó un BAFTA al mejor drama de televisión y un Emmy al mejor drama internacional.
En 1976, Parker escribió y dirigió su primer gran éxito, Bugsy Malone, una parodia de las primeras películas de gángsters y de los musicales americanos, pero con actores menores de edad. La película recibió ocho nominaciones a los premios de la Academia Británica y cinco estatuillas, incluidos dos BAFTA para Jodie Foster.
La consagración le llegó dos años más tarde, con Midnight Express (El expreso de medianoche). Basada en la historia de Billy Hayes, que fue encarcelado y se fugó de una prisión turca por tratar de sacar marihuana de contrabando. El guión fue escrito por Oliver Stone, que ganó el Óscar a mejor guionista. La música fue compuesta por el italiano Giorgio Moroder, uno de los pioneros de la música electrónica, que también recibió un premio de la Academia a la mejor banda sonora.
Parker pasó a lo largo de su carrera por diferentes temas y géneros. Dispara a la Luna fue un drama familiar, Corazón de Ángel un thriller y Mississippi Burning un poderoso drama de derechos civiles que fue nominado a siete premios de la Academia. Parker fue también un notable director de musicales, un género que abrazó y expandió. El primero fue Fama (1980), que muestra la vida de ocho estudiantes a través de sus años en la Escuela Superior de Artes Escénicas de la ciudad de Nueva York. Fue un filme muy taquillero, del que surgió una serie televisiva.
En 1996 dirigió otro musical, Evita, de Andrew Lloyd Webber, protagonizada por Madonna, Antonio Banderas y Jonathan Pryce. Evita fue nominada a cinco premios Óscar, ganando el premio a la mejor canción original, que fue cantada por Madonna.