El actor Michael Douglas recibirá la Palma de Oro de Honor en la 76.ª edición del Festival de Cannes en la ceremonia de inauguración el próximo martes 16 de mayo. Icono de Hollywood durante más de cuatro décadas, el intérprete será galardonado "en reconocimiento a su brillante carrera así como a su compromiso con el cine", según ha anunciado la organización en un comunicado.
"Siempre es un soplo de aire fresco estar en Cannes, que ha sido durante mucho tiempo una maravillosa plataforma para creadores atrevidos, audacia artística y la excelencia en la narración de historias", ha declarado el actor, uno de los mayores iconos de Hollywood de las últimas décadas.
"Desde mi primera vez aquí en 1979 con El síndrome de China hasta mi más reciente estreno de Behind the Candelabra en 2013, el festival siempre me ha recordado que la magia del cine no está solo en lo que vemos en la pantalla, sino en su capacidad para impactar a la gente alrededor del mundo. Después de más de 50 años en el negocio, es un honor regresar a la Croisette para inaugurar el festival y abrazar nuestro lenguaje cinematográfico global compartido", ha añadido el protagonista de películas como Wall Street, Un día de furia, The Game o Instinto básico.
La primera vez que Douglas visitó Cannes, lo hizo acompañado por los actores Jane Fonda y Jack Lemmon, así como por el director James Bridges, para la presentación de El síndrome de China. Trece años después, en 1992, se presentó en competición Instinto básico, de Paul Verhoeven. La película, que revolucionó el género de suspenso, "fue la comidilla de la Croisette", recuerdan desde el festival, y catapultó a Sharon Stone a la fama internacional, además de confirmar el talento interpretativo de Douglas.
Un año después Michael Douglas participó en el festival por tercera vez, por su papel en la película Falling Down, de Joel Schumacher. Después pasarían veinte años hasta que en 2013 presentó Behind the Candelabra, de Steven Soderbergh, donde Douglas interpretó al famoso cantante y pianista Liberace.
Michael Douglas heredó el amor por el cine de su padre, Kirk Douglas, otro gigante de la interpretación que en 1980 presidió el jurado de Cannes, otorgando la Palma de Oro ex aequo a Akira Kurosawa por Kagemusha y a Bob Fosse por All That Jazz.
Michael Douglas ha trabajado como actor con los más grandes de la industria, como Robert Zemeckis en Romancing the Stone (1984), Ridley Scott en Black Rain (1989) o Barry Levinson en Disclosure (1994). Con Oliver Stone, ganó el Óscar al Mejor Actor en 1987 por su interpretación de Gordon Gekko, un codicioso corredor neoyorquino de Wall Street. La secuela, Wall Street: Money Never Sleeps, se proyectó fuera de competición en la 63.ª edición del Festival de Cannes.
Además de ser actor, Michael Douglas también ha sido productor. La primera película en la que ejerció este rol —en colaboración con Saul Zaentz— fue nada menos que Alguien voló sobre el nido del cuco, el filme del director Milos Forman que ganó el Óscar a mejor película en 1975.
"Además de su valiosa contribución al cine, Michael Douglas aboga por múltiples causas. En su calidad de Mensajero de la Paz de las Naciones Unidas, ha estado comprometido con el desarme nuclear en todo el mundo desde 1998 y también ha sido un defensor del control de armas en los Estados Unidos", recalca el festival.
Para completar el homenaje a Michael Douglas, un documental inédito de Amine Mesta sobre su figura se proyectará en el recinto del festival durante dos días, desde el domingo 14 de mayo hasta el martes 16 de mayo.