Robert De Niro se enfrenta a las acusaciones de maltrato laboral de su ex asistenta personal, Graham Chase Robinson. El actor, que acaba de estrenar Los asesinos de la luna, último filme de su fiel compañero Martin Scorsese, ha acudido a los tribunales de Nueva York para testificar en el juicio.
Robinson le ha demandado por 12 millones de dólares en daños y perjuicios por angustia emocional severa y daño reputacional. En concreto, y según apunta el portal de noticias TMZ que ha tenido acceso a la denuncia, Robert De Niro ha sido demandado por hacer comentarios sexuales, abusar verbalmente y adjudicarle "tareas estereotípicamente femeninas", una demanda que Robinson presentó después de que el actor le demandase a ella.
Y es que, en agosto de 2022, el actor de Taxi Driver demandó a Chase Robinson alegando que vio 55 episodios de Friends durante 4 días seguidos y que utilizó la tarjeta de crédito de la empresa para comprar comidas de lujo.
Como prueba en el juicio, la asistenta presentó un mensaje de voz que le envió el actor. En el mensaje, se puede escuchar a De Niro diciendo: "¿No respondes a mis llamadas? ¿Cómo te atreves? Estás a punto de ser despedida. ¿Cómo te atreves?". Además, arremete contra ella llamándola "mocosa malcriada" cuando Robinson pidió un nuevo puesto, espetándola "que te jodan".
Robinson, que trabajó para De Niro entre 2008 y 2019, cobraba 300.000 dólares anuales antes dejar en 2019 su puesto como vicepresidenta de su productora Canal Productions, al que renunció debido a varios enfrentamientos con la novia del actor, Tiffany Chen.
La mujer, encargada durante años de todo, desde decorar el árbol de Navidad de De Niro hasta llevarlo al hospital cuando se caía por las escaleras, aseguró que De Niro le trataba como "una especie de sirvienta doméstica", a pesar del rango que tenía en la productora, y que se negó a darle una referencia para encontrar otro trabajo al renunciar a su puesto con él.
Bromas sexuales, insultos y discriminación
Además, indicó que el actor se emborrachaba a menudo, le hacía bromas sexuales sobre su receta de Viagra, le pedía favores a horas insospechadas y se quedó de brazos cruzados cuando uno de sus amigos le dio una bofetada en el trasero.
Durante el juicio, De Niro estalló en numerosas ocasiones ante las acusaciones, asegurando que "¡Todo esto son tonterías!". Aunque aceptó que había incluido a Robinson como su contacto de emergencia en un momento dado e insistió en que la había tratado bien, hasta el punto de confiar en ella para que le ayudara con las tarjetas de felicitación para sus hijos.
Pero cuando un abogado de Robinson le preguntó si la consideraba una buena empleada, se burló:"No después de todo lo que estoy pasando ahora".
Asimismo, el actor mostró en el juicio la correspondencia entre él y Chen, en el que demostraba que habían tenido sospechas de que Robinson estuviese celosa de su relación, y de que actuaba como si fuera la esposa de De Niro y creía que tenía una "intimidad imaginaria" con él. "Ella sentía que había algo ahí y puede que tuviera razón", dijo De Niro en defensa de las sospechas de su novia.