'Soy Nevenka': Icíar Bollaín presenta una monótona y timorata reconstrucción del sufrimiento
La película aborda el acoso psicológico y el abuso sexual que sufrió la joven concejala del Ayuntamiento de Ponferrada por parte del alcalde Ismael Álvarez.
27 septiembre, 2024 01:49Tras retratar en Maixabel (2021) a Maixabel Lasa, la mujer que accedió en el año 2000 a encontrarse cara a cara con los etarras que asesinaron a su marido, Icíar Bollaín estrena este viernes, tras su paso por la sección oficial de San Sebastián, la historia de otra mujer que saltó al foco mediático a principios de siglo.
Soy Nevenka aborda el acoso psicológico y el abuso sexual que sufrió la joven concejala de Hacienda del Ayuntamiento de Ponferrada Nevenka Fernández por parte del alcalde Ismael Álvarez, en un caso muy mediático que desembocará en la primera condena a un político español por delitos de esta naturaleza. Sin embargo, fueron muchas las voces que defendieron al regidor durante el proceso y quisieron demonizar a la víctima, tachándola de buscona y de trepa.
Tras conocer todos los ángulos del caso gracias a un documental de Netflix, Nevenka (Maribel Sánchez-Maroto, 2021), a una reciente obra de teatro de María Goiricelaya y al libro Hay algo que no es como me dicen: el caso de Nevenka Fernández contra la realidad de Juan José Millás (Debolsillo, 2005), Bollaín y la guionista Isa Campo deciden centrarse en el martirio que sufrió la joven desde su entrada en política hasta el inicio del juicio.
Vemos, por tanto, como su relación con Ismael Álvarez pasa de la complicidad al acoso más insoportable, mientras la salud física y mental de Nevenka se va deteriorando. En este sentido, tanto Mireia Oriol como Urko Olazabal realizan un notable trabajo a la hora de hacer evolucionar a los personajes. En especial, destaca Olazabal, que resulta creíble como campechano y seductor alcalde y así como sosias del Harvey Weinstein más retorcido, a pesar de que el material con el que tiene que trabajar no es propenso a las sutilezas.
Podría haber sido un intenso relato de terror, ya que la historia es absolutamente demencial, pero la puesta en escena de Bollaín prefiere alejarse del riesgo y ofrecer un viaje lineal con textura de telefilme que pretende ser objetivo, pero solo logra la monotonía.
Así, es incapaz (o tiene miedo) de aportar algo a un caso que, sin duda, merece ser recordado. Ese es quizá el mayor mérito del filme, recordarnos como no hay que remontarse demasiado en el tiempo para dar con un caso tan vergonzoso para la sociedad española como este.
Entre lo mejor de Nevenka se encuentra ese momento en el que la protagonista y el teniente de alcalde entonan en un karaoke ese “hoy voy a ir al grano, te voy a meter mano” de Amistades Peligrosas, sacando a relucir el poco respeto que había hacia el consentimiento hace tan solo 25 años. Entre lo peor, ese ensalzador retrato de la rival política, sin una sola doblez.
En definitiva, un filme que puede llegar a emocionarnos por la valentía de Nevenka Fernández, pero que no consigue trascender la crónica negra, o el documental previo. Una pena, porque había talento para hacerlo.
Soy Nevenka
Dirección: Icíar Bollaín.
Guion: Icíar Bollaín, Isa Campo.
Intérpretes: Mireia Oriol, Urko Olazabal, Ricardo Gómez, Carlos Serrano, Lucia Veiga.
Año: 2024
Estreno: 27 de septiembre