Locomía

(Jorge Laplace, 2022) - Movistar+

La docuserie Locomía, dirigida por Jorge Laplace, se ha convertido en fenómeno en la plataforma de Movistar +, situándose como la serie de no ficción más vista en 2022. Y es que la historia de aquel grupo musical, célebre por menear elefantiásicos abanicos, tiene mucha más miga de la que podíamos imaginar los profanos:

Un maquiavélico y magnético líder, Xavier Font; un controlador y orgulloso productor musical, José Luis Gil, un carrusel de sueños rotos entre los componentes de la formación, un itinerario fulgurante desde los arrabales de Barcelona hasta el sueño americano, pasando por una Ibiza libre y festiva, un impresionante compendio de anécdotas (impagable la que concierne a Freddie Mercury) y la capacidad de servir como metáfora de la convulsa España de principios de los 90. 

"Locomía es un culebrón", explica Laplace a El Cultural. "No es que quisiéramos que lo fuera, no se trata de una decisión que tomé al principio de la producción, simplemente trabajé muy a favor de lo que era. La historia del grupo tiene depresiones, celos, ambición, venganza…  Pero, además, tiene una segunda capa que nos permitía hablar de cómo se modernizó el país".

Jeen-Yuhs: una trilogía de Kanye West

(Coodie and Chike, Coodie Simmons, Chike Ozah, 2022) - Netflix

'Jeen-Yuhs: una trilogía de Kanye West'

Jeen-Yuhs es una de las docuseries musicales más sorprendentes de los últimos años. Dividida en tres capítulos de en torno a una hora y media de duración, estamos ante una zambullida en la intimidad y la trayectoria del rapero Kanye West, el hombre que llevó el hip-hop al siglo XXI. Tal era la confianza que tenía en sí mismo West que decidió que su colega Clarence "Coodie" Simmons documentara con una cámara sus pasos en Nueva York a finales de los 90, a donde había llegado desde Chicago como un prometedor productor, seguro de que estaba a punto de hacer historia. Sin embargo, le costó que la industria le tomara en serio como MC, aunque cuando lo logró ya no hubo quién le parara.

Desde aquella época hasta la actualidad, con varias lagunas de por medio motivadas por el empacho de fama y el inestable estado psicológico del rapero, Coodie grabó cientos de horas con el cantante. El resultado es asombroso en sus dos primeros capítulos, que recogen hasta el momento en el que West se convierte en la estrella más grande del planeta y salda -con cierta malicia- todas las cuentas pendientes con los que dudaron de su talento.

Y el tercer capítulo, que da un importante salto en el tiempo, nos lo presenta como un hombre con una salud mental muy frágil y con un ego inconmensurable, una especie de Ciudadano Kane recluido en su despampanante rancho, tras acercarse a Trump y presentar su propia candidatura a la Presidencia de Estados Unidos. En definitiva, un documental que quizá no es capaz de establecer la importancia a nivel musical del sujeto de estudio, pero que nos acerca el lado más personal y complejo de un hombre al que la fama le ha pasado factura.

1971: el año en que la música lo cambió todo

(Asif Kapadia, Danielle Peck, James Rogan; 2021) - Apple TV

Marvin Gaye en '1971: el año en que la música lo cambió todo'

¿Qué tienen en común discos como Who’s Next de The Who, What’s Going On de Marvin Gaye, Imagine de John Lennon, Tapestry de Carole King, Sticky Fingers de The Rolling Stones, Pearl de Janis Joplin o There’s a Riot Goin’ On de Sly and the Family Stone? Además de ser algunos de los mejores discos de rock de la historia, todos ellos fueron publicados en 1971, un momento convulso de la historia de Estados Unidos, con la juventud comprometida con la lucha por los derechos civiles y renegando de la Guerra de Vietnam.

En esta docuserie de 8 episodios de 45 minutos, Danielle Peck, James Rogan y Asif Kapadia (que ha rodado documentales sobre figuras como Senna, Amy Winehouse o Maradona) se valen de valioso material de archivo -en gran medida, inédito- y de entrevistas de la época para tratar de capturar el zeitgeist del momento. Y sin dejar de dar protagonismo a las maravillosas canciones de la época, cuyas letras aparecen en ocasiones impresas en la pantalla.

La serie adolece de un hilo conductor o una tesis clara, pero funciona por el valor acumulativo de unas anécdotas tan divertidas como extravagantes y por ofrecer un acercamiento al clima contracultural en el que emergió la liberación de la mujer, el movimiento del Black Power o el movimiento LGTBIQ.