Infrared, por la Kibbutz Contemporary Dance Company.

El próximo jueves comienza en Oviedo, en el teatro Campoamor, el Festival de Danza organizado con motivo del 120 aniversario del coliseo. El programa reúne un repertorio que permitirá al público apreciar la historia de la danza desde hoy, con trabajos que ilustran su actual desarrollo, hasta el siglo XIX, con la eclosión y el esplendor de los ballets románticos .



La actuación del Kibbutz Contemporary Dance Company (KCDC) de Israel, una de las tres grandes compañías dancísticas de aquel país, abre el día 15 el Festival. La historia de esta formación está vinculada a la de su fundadora, Yehudit Arnon, que la dirigió hasta 1996 como una extensión del Grupo de Danza de la Región de Galilea Occidental. Pronto destacó por introducir a los niños en el mundo de la danza, a través de un programa escolar que precisamente desarrolló Rami Beer, su actual director. La compañía está asentada en el kibbutz Gaaton , donde se ha creado la Ciudad de la Danza. En Oviedo presentan Infrared, una de sus más celebradas creaciones original de Beer. A continuación, el 30 de abril, le tocará el turno al Ballet de la Ópera de Ginebra, compañía creada hace 50 años al frente de la cual han figurado importantes figuras. Su programa también tiene un acento contemporáneo: en Transit Umbra el coreógrafo Francesco Ventriglia cuenta la historia de una mujer y de un hombre que superan sus miedos con música de Schönberg; en Sed Lux Permanent Ken Ossola, con música de Fauré, plantea un diálogo entre vida y muerte.



La gran danza clásica llegará con el Ballet del Kremlin, que presenta dos grandes títulos: Giselle y Figaro (4 y 5 de mayo). La representación española dará paso a una de las pocas formaciones de ballet neoclásico de nuestro país, la de Víctor Ullate y la Comunidad de Madrid. Sin embargo, llegan con un trabajo moderno, obra del propio Ullate: Samsara (7 de mayo). El Ballet de Zurich, el más importante de Suiza, que obtuvo un gran éxito en su presentación en el Real el pasado año con Variaciones Golberg, comparece el 11 de mayo. Su director Heinz Spoerli ha impulsado un repertorio clásico y contemporáneo con ballets originales a partir de grandes obras musicales. Bach, Mahler, Schumann y Chopin han sido sus grandes inspiradores. Presenta In den Widen im Nichts, basado en suites para violonchelo de Bach. Los Ballets de Montecarlo cerrarán el Festival, el 14 de junio, con una Cenicienta ideada por Jean-Christophe Maillot y música de Prokofiev.