Los espectáculos culturales, incluido el cine, pasarán del 8 al 10%; discos, DVDs y obras de arte, del 18 al 21%.
La recién anunciada subida del IVA del Gobierno ha sido recibida por el mundo de la cultura como un mazazo que dificultará aún más la subsistencia de un sector ya muy azotado por la crisis.Por agravio comparativo, uno de los sectores peor parados es el del arte. Durante años, el sector ha luchado por que se le aplique el IVA reducido (8%, a partir de ahora el 10) a la compraventa de obras de arte, en lugar del tipo general (18%, de ahora en adelante el 21). Con esta subida, ven con impotencia cómo en lugar de alcanzar sus expectativas, el viento de cara arrecia.
Moisés Pérez de Albéniz, presidente del Consorcio de Galerías de Arte Contemporáneo, lamenta la noticia: "Cuando se habla de arte rápidamente vienen a la mente imágenes de grandes subastas, pero las galerías españolas estamos muy lejos de eso. Nuestro terreno es el de la promoción de artistas jóvenes, de su representación en el extranjero, y manejamos precios muchísimo más bajos. Hasta que no se tome conciencia de nuestro papel de difusión cultural no cambiará el modo en que se nos trata. Pero la palabra "crisis" se ha convertido en un comodín para no aceptar negociaciones".
Aunque reconoce que la rebaja del IVA general al reducido depende de Europa, esta subida resta competitividad a las galerías españolas frente a las extranjeras. Más teniendo en cuenta que, aunque los informes oficiales no lo reflejan, Alemania y Francia aplican a menudo el tipo reducido sin que la Unión Europea haga nada.
El disco también ha reivindicado sin éxito en los últimos años la aplicación del IVA reducido, pero como en el caso del arte, depende de las directivas europeas. Para Antonio Guisasola, presidente de Promusicae -la asociación de productores musicales-, la música sigue siendo la "hermana pobre" de la cultura en nuestro país. "La subida del IVA es una mala noticia para un sector que ya lleva años penalizado frente al resto de sectores culturales. Resulta inconcebible que el sector de la música tenga que asumir un IVA que duplica al del cine y quintuplica al del libro. Evidentemente esto no va a ayudar a un sector cultural que no recibe ninguna ayuda pública y que se ha visto devastado por la falta de voluntad política de atajar de una vez el problema de la piratería".
Espectáculos culturales
Aunque los espectáculos culturales cuentan con un tipo de IVA reducido, la subida de dos puntos ha sido recibida, por lo general, con el mismo rechazo. El consultor y productor teatral Robert Muro considera un "error estratégico" incrementar los impuestos al consumo cultural. "Reducir los presupuestos en cultura -y en investigación, educación y salud-, es mendrugos para hoy y hambruna para mañana. En situaciones como la actual el dinero debe salir de quienes tienen más, no de quienes tienen poco. Y la cultura ya tiene muy poco en España. Este lecho de Procusto en que se han convertido los recortes va a dejar a la sociedad sin pies y sin cabeza".En cambio, el empresario teatral Enrique Salaberría, dueño de Smedia, que gestiona una docena de salas en Madrid, le quita hierro al asunto. "El público no se mueve por la subida o la bajada del IVA. Lo que hace que vengan son las emociones. El verdadero problema del teatro en España es que carece de un sector profesional, de una industria", afirma.
Por su parte, los exhibidores cinematográficos lanzaron ayer un comunicado de protesta a través de la Federación de Cines de España (FECE), representante del 80% de las salas de cine de España. En el texto denunciaban que "con la subida del IVA se penaliza y se agrede al consumo, obligando a una subida de precio de difícil encaje en el mercado, y se genera desconfianza en el sector empresarial, contradiciendo una de las máximas electorales del Gobierno actual".