Image: La reventa, ex convicta reinsertada

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La reventa, ex convicta reinsertada

Una empresa española lidera el mercado secundario legal de entradas para eventos en la Península, Italia y Latinoamérica

9 enero, 2013 01:00


"Vendo boli Bic por 500 euros y regalo entrada para José Tomás". Infinitas versiones de esta triquiñuela, tan vista en portales como eBay, son las hijas digitales del señor de gabardina y andar distraído en las inmediaciones de Las Ventas o en la cola de un concierto. La reventa de entradas es una de esas actividades prohibidas por una ley que, al quedar desactualizada por los usos cambiantes de la sociedad, deja unos resquicios por los que se cuela la picaresca.

En este caso, el artículo 67 del Reglamento General de Policía de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas, de 1982, prohibe expresamente la reventa "callejera" de entradas. Con la llegada de Internet y las plataformas de venta de segunda mano, llegó también el vacío legal, pues el vendedor ofrece su producto desde casa y queda con el comprador en el bar de la esquina para hacer el intercambio.

Pero el objeto de la prohibición, se entiende, es evitar el lucro económico al margen del fisco. Aún queda, pues, aquello del "espíritu de la ley", que promueve su aplicación más allá de su literalidad. Así que, por si acaso, quien pone un anuncio en la red se cubre con la artimaña del carísimo boli o folio en blanco con obsequio de entrada.

El tema es complejo y en varios blogs y foros legales y policiales se puede comprobar que suscita más de una duda entre juristas y entre los agentes que supuestamente deben actuar en estos casos. Por ejemplo, si alguien tiene una entrada para un evento al que no puede asistir, ¿es ilegal que la venda aunque no exista ánimo de lucro? ¿El adquiriente comete algún delito? ¿Existe fraude de ley en el truco del bolígrafo?

A río revuelto, ya se sabe. Ticketbis es una empresa española que ha venido a poner orden y transparencia en este caos. La fundaron Ander Michelena y Jon Uriarte hace tres años y ya tiene presencia en doce países. "La reventa de entradas lleva toda la vida en la calle, pero es una actividad un tanto oscura, ilegal cuando se realiza de forma callejera y que no contempla ningún sistema de garantía o seguridad para comprador y vendedor, el cual no paga impuestos", explica Uriarte. "Lo que pretendemos es regularizar y normalizar este sector y que la gente pueda comprar y vender sus entradas de una forma transparente y segura. Nuestra empresa paga debidamente los impuestos de cada una de las transacciones realizadas en nuestros portales, garantiza la autenticidad de las entradas, y aporta un servicio de control y seguridad para todos los usuarios del portal", añade.

En Ticketbis, el vendedor es libre de poner el precio que quiera, por debajo o por encima del precio de taquilla. Una empresa de mensajería se encarga de recoger y entregar las entradas en mano. Como medida de seguridad, el vendedor no recibe el importe de sus entradas hasta que se haya celebrado el evento y se haya comprobado que las entradas son originales y corresponden con las que el comprador había adquirido. Por otra parte, desde el departamento financiero se hacen controles rutinarios para comprobar que no se producen incidencias en los pagos, informan desde la empresa.

Los dos socios fundadores, con experiencia en el sector de banca de inversión, siempre tuvieron la idea de emprender su propio negocio y a la vez se sentían atraídos por el mundo online. Así, estudiaron durante meses muchos casos de startups de éxito en otros países hasta dar con la tecla. "Los comienzos fueron bastante mejor de lo que esperábamos: a los seis meses de comenzar a trabajar con la plataforma alcanzamos el punto muerto de la inversión, y los buenos resultados nos animaron a comenzar con la expansión internacional", explica Uriarte. Tres años después, están presentes en doce países, tienen oficinas en Bilbao, Sao Paulo, México DF y Buenos Aires y casi un centenar de trabajadores. "Ticketbis es un proyecto global, líder del sector en España, Italia, Portugal y Latinoamérica, pero contamos con profesionales locales de cada uno de los mercados en los que operamos".

Sus mayores competidores en Europa son dos empresas británicas muy potentes, afirma Uriarte. En Estados Unidos, por su parte, ya había varios portales similares, como StubHub, una filial de eBay que lleva diez años funcionando. Allí el mercado secundario está mucho más desarrollado, así que decidieron especializar su servicio en aquel país ofreciendo entradas para eventos en el extranjero y así fue como nació Tixabroad.com, donde Plácido Domingo figura como número uno en la categoría "Theatre".