Michael Nyman. Foto: Francesco Guidicini.
De vez en cuando los hados se ponen de acuerdo y reúnen en el espacio de unos días a excelentes artistas en un mismo lugar. Sucede por estas calendas en España, donde coinciden el ruso-judío-americano Yefim Bronfman (1958), el cubano Jorge Luis Prats (1956) y el canario Iván Martín (1978).
El primero participa en el Auditorio de Madrid con la Orquesta Nacional en un bello programa que incluye Don Juan y la Suite de Valses de El caballero de la rosa de Richard Strauss y el Concierto n° 2 de Brahms, que es donde se habrá de lucir este corpulento músico de limpia digitación, lógico discurso y estilo severo. Como severos eran algunos de sus maestros: Rudolf Firkusny, Leon Fleischer y, en particular, Rudolf Serkin. No hace mucho pudimos aplaudirlo en una concentrada versión del Concierto n° 2 de Bartók. Estará acompañado, esta tarde y la del domingo, por la batuta de Nikolaj Znaider, excelente violinista y aventajado director.
El segundo aparece el 30 de abril como fruto del azar en el ciclo Grandes Intérpretes de la Fundación Scherzo. Sustituye al en principio anunciado Zoltan Kocsis, que se encuentra enfermo. Gracias a esta circunstancia fortuita podremos reencontrarnos con este irregular instrumentista, afamado durante un tiempo, varias veces galardonado en diferentes concursos y posteriormente oscurecido, quizá a consecuencia de una crisis personal y artística. En sus horas bajas tuvo una poco afortunada actuación en el Festival de Granada de hace unos años tocando un concierto de Brahms. Pero ha vuelto con renovados bríos a la palestra. Sus virtudes de pianista brillante, de poderosa pulsación y fraseo imaginativo, podrán seguirse en ese concierto, en el que ofrecerá un plato fuerte cual es la serie de 24 Preludios de Chopin. Interpretará asimismo Bachianas brasileiras de Villa-Lobos, Fantasía de Carmen de Busoni, La valse de Ravel, Altagracia de Farinas y Andante spianato y gran polonesa de Chopin.
Por su parte Iván Martín, que actúa los días 2 y 3 de mayo en el Miguel Delibes de Valladolid, pondrá de manifiesto sus virtudes (ejemplar sentido del ritmo, claridad de digitación, juego de dinámicas y alado fraseo) en el Concierto n° 2 del compositor minimalista Michael Nyman, que se estrena en España. Aunque lo más importante es el alumbramiento mundial de la Sinfonía n° 5 del músico inglés, próximo a festejar su setenta aniversario. La sesión, que tiene el concurso de la Orquesta de Castilla y León y estará dirigida por el ascendente Jaime Martín, se completa con la suite del Contrato del dibujante.