¿Qué diria Jimmy, el protagonista de la película Quadrophenia, si supiera que los Who inician una gira mundial y que puede servir de punto y final de la banda? Probablemente se escabulliría del trabajo, pillaría una buena dosis de metanfetaminas (de las azules, claro) y saldría con sus colegas a reventar las calles. Probablemente se agarrarían una buena, se meterían en una pelea contra un grupo de rockers y acabarían arrastrando sus zapatos por cualquier acera camino a casa con las pupilas dilatadas. Jimmy es uno de esos chavales mod como los Who de los 70. Ahora, después de unos cuantos años de carreteras, de consumo y abuso de cocaína, de conciertos, de reventar guitarras y de una vuelta a los escenarios tras un silencio que duró varios años, se van de gira. Una gira mundial que probablemente sea la última de una banda convertida en dúo formado por dos miembros; Pete Townshend (guitarrista y letrista) y Roger Daltrey (voz).
Una casualidad hizo que se conocieran y formaran la banda. En los años 50, Daltrey formaba parte de The Detours al tiempo que Townshend y John Entwistle tocaban en The Confederates. Daltrey un día se cruzó con Entwistle en la calle y le reconoció del colegio. Este llevaba el bajo sobre su espalda cuando el vocalista le paró para preguntarle qué era lo que trasportaba. En aquel momento el bajo era un instrumento nuevo que poca gente conocía. Curioso por aquel sonido, le sugirió que entrara en su formación. De esta manera, pocas semanas después, el bajista quiso que la eléctrica guitarra de su antiguo compañero se uniera. Y así fue. El grupo ya estaba completo pero se dificultaba la grabación de un disco. Les pedían un batería mejor que el que tenían. De buenas a primeras este se marchó y de esa huida llegó el mejor: Keith Moon.
Así, con el elenco completamente formado hubo momento que marcaría el futuro, identidad, originalidad de la banda. Lo que realmente les hacía únicos, esa identidad que se convirtió en emblema. Moon, el batería, se aburría tocando a 12 compases y comenzó a aumentar el ritmo. Esto hizo que Townshend tuviera que duplicar el ritmo de su guitarra, que Entwistle tuviera que tocar más ritmos de jazz entre medias. El blues que tocaban sellaba la diferencia y es así como The Detours pasó a llamarse The Who.
Pete Townshend destrozando una guitarra en uno de los conciertos
Rozando la locura en uno de los conciertos en un pub, Townshend, que siempre tocaba la guitarra alzada al vuelo, vio cómo se anclaba al techo y decidió terminar de romperla. Ante la estupefacción del público y del batería Moon, todos enloquecieron. En el siguiente concierto destruyó otra guitarra. Se abría la veda a uno de los rituales de cada concierto. Fue del artista Gustav Metzger de quien tomó la idea de la destrucción. Pero aún contaban con un problema y es que copiaban las canciones de otros grupos cuando los Beatles, los Rolling y los Kinks prendían fuego en las calles de Londres con sus propias letras. Necesitaban un compositor. Y Pete Townshend fue la pieza clave para terminar de imprimir un estilo propio. Así es como con la canción I can't explain, de la cual su compositor pensaba que era inmadura, entraron al octavo puesto de las listas de las radios inglesas. Y llegó la revolución.
O, tal vez, sería más acertado decir que el disco My Generation fue su verdadera lanzadera. Y aquel emblemático solo del bajo de Townshend. Vibrante, eléctrico y una llamada a toda la juventud. No niegan el uso de las anfetaminas en esta época de la banda pero como dice Daltrey en el documental Amazing Journey. Story of The Who: "las anfetaminas no son compatibles con un buen cantante". Recuerda que la música se convirtió en ruido y todo el trabajo que les había costado llegar hasta donde estaban lo habían echado a perder. El peligro de las drogas acechaba una banda en la que los integrantes de la misma no tenían nada en común entre ellos.
John Entwistle y Pete Townshend
Peleas también hubo entre los chicos. Cabe recordar que el grupo se creó con una base de competición entre ellos. Competición por ser el mejor batería, por el ser mejor bajista, por ser el mejor guitarrista. La peor parte se la llevaba el cantante porque se veía como una voz. Nada más.Hasta la fecha habían tenido éxito pero aún había una idea que rondaba la cabeza del líder de la banda. Quería que cada uno de los discos fuera una obra unificada. Es así como lanzan A Quick One y luego vendría Who Sell Out, disco con el que la idea maduró, recibió buenas críticas y les llevó de gira por los escenarios de Estados Unidos como teloneros de Herman's Hermits. Townshend ahora quiere trabajar de manera más espiritual para llevar a realizar otra de sus ideas: crear una ópera rock. Por supuesto esta sería Tommy. Siguieron trabajando y desarrollando su propio sonido e identidad.
Esto se tradujo en un trabajo llamado Lifehouse, donde crean un show interactivo que nadie entendió. De modo que su próximo éxito fue Quadrophenia (1973). Este disco habla de las diferentes personalidades que tiene un chico mod llamado Jimmy (las cuatro personalidades se asemejaban a cada uno de los integrantes). Al igual que en la película, tiene problemas con su novia, sus padres, las drogas y con su grupo de amiguetes buscan la movida en las calles de Brighton contra un grupo de rockers. La gran batalla campal que tuvo lugar en la playa y tuvo una gran repercusión en el movimiento mod, hasta el punto que marcó el inicio del final.
El batería Keith Moon
It's Hard fue un disco que sacaron posteriormente y que obtuvo buenas críticas pero ellos ya no eran los mismo. Townshend quiso hacer de The Who una banda de estudio aunque no fue capaz de crear buen material. En 1982 se separan aunque en 1989 se vuelven a juntar para Bob Gedolf. Tuvo tanto éxito la idea que su gira se prolongó, hicieron reuniones y, finalmente, el año 2004 se juntaron para crear nuevas canciones. Aunque desde entonces no se les ha conocido gran actividad musical.
Ahora, a finales del 2014, los Who anuncian una gira, que comienza este miércoles, y les llevará por los escenarios del Reino Unido y Estados Unidos. Comentan que son conscientes de su edad. Tal vez sea el final activo de una banda que nunca dejará de existir en el imaginario de muchas generaciones. El talento de Moon, la electricidad de Townshend, la formación de Entwistle y el carisma de Daltrey dejó de ser un equipo hace tiempo con la muerte de dos de sus integrantes. Ahora, el vocalista y el bajista, a modo de dúo, harán saltar chispas por los diferentes escenarios. Con seguridad, Jimmy estaría feliz y, a la vez, triste. La última partida del quién es quién de The Who está a punto de comenzar.