Christian Thielemann se pondrá por primera vez al frente del célebre Concierto de Año Nuevo de Viena. Foto: Matthias Creutziger
El maestro berlinés dirigirá el Concierto de Año Nuevo en la Musikverein de Viena. Recorremos además las citas musicales navideñas más interesantes en España: encontramos en atriles muchos ballets de Chaikovski (Cascanueces sobre todo) y el Mesías de Haendel.
El magno oratorio haendeliano se sitúa también en los atriles de la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla, con un coro de aficionados de 410 voces (día 22); concierto éste patrocinado, como el del día 18 en Madrid, por la Fundación "la Caixa", que está detrás también de otras tantas sesiones periféricas dedicadas a la misma composición, echando mano en algunos casos de la intervención popular. La Coruña, Albacete, Bilbao, Gijón, Granada, Málaga, Santa Cruz de Tenerife, Valladolid y Zaragoza serán las sedes. De especial interés, y cambiando de compositor, es la cita convocada para mañana por la Capilla Real de Madrid que gobierna Óscar Gershensohn, y que ofrece en el CentroCentro del Ayuntamiento un compacto concierto dedicado a Bach: se escuchan la Cantata n° 5 del Oratorio de Navidad BWV 248 y las Cantatas BWV 36 y BWV 133.
La tan activa Fundación Excelentia redobla sus propuestas en esta época. Apuntamos entre las más llamativas la Gala Lírica de Navidad de mañana, el Concierto de Año Nuevo, con la Orquesta de Santa Cecilia (27), todo en el Auditorio Nacional. En el de los Duques de Pastrana se prevé un Concierto de Año Nuevo dirigido por Larsen (30). En esta línea festiva, que celebra la llegada del nuevo año, hay en nuestro país ofertas para dar y tomar. El día 28, por ejemplo, tenemos en el Palacio de la Ópera de La Coruña el típico clásico navideño con El cascanueces de Chaikovski a cargo del Ballet Estatal de Moscú. La misma propuesta coreográfica tendrá lugar un poco antes en el Auditorio Víctor Villegas de Murcia, en este caso con protagonismo de la Compañía Nacional de Danza (20, 21, 22). Ballet también, en este caso el de Víctor Ullate, en la oferta del Teatro Auditorio de El Escorial, que pondrá en escena (23) el famoso libro Peter Pan, de James Matthew Barrie. La danza igualmente lucirá en la velada de la Strauss Festival Orchestra y Ballet el domingo 30: valses y polcas.
En esta línea artística se sitúan otras muchas de las citas programadas. Centrándonos en Madrid, y en el Auditorio Nacional, la modesta Fundación Orquesta Sinfónica de Chamartín y su Orfeón ofrecen obras de Chaikovski (Cascanueces, casualmente), Haendel, Vivaldi y Adam junto a una selección de villancicos (21). Días después (29) la Orquesta y Coro Filarmonía, con su fundador, Pascual Osa, al frente, aborda su tradicional menú navideño que incluye una selección de valses y polcas de los Strauss. El mismo día es la conocida convocatoria del Teatro de la Zarzuela que este año reúne tres importantes voces, las de la soprano lírico-ligera Isabel Rey, la de la mezzo lírica María José Montiel y la del barítono de carácter Juan Jesús Rodríguez, quienes bajo el mando del competente Ramón Tébar interpretarán piezas de Barbieri, Chapí, Fernández Caballero, Chueca, Valverde, Soutullo, Vert, Giménez, Luna y Moreno Torroba, entre otros.
Y el Teatro Real aporta también propuestas tan llamativas al periodo navideño como la participación del conocido divulgador y comunicador Ara Malikian, un violinista de clase que ha encontrado una veta magnífica para hacerse oír. Va por el mundo últimamente con su Increíble Gira de Violín en la que va guiando a los espectadores acompañado de una banda con la que circula por terrenos intermedios y de ‘fusión': rock, música clásica, valses, fanfarrias de los Balcanes, percusiones y un variado instrumental concurren en el espectáculo (28). En el mismo escenario nos reencontramos con la Fundación Excelentia, su Orquesta Clásica Santa Cecilia y Lavard Skou Larsen que brindan el típico popurrí de músicas vienesas (1 de enero).
Algunas de estas actividades más o menos locales tienen con frecuencia la tradicional referencia del célebre Concierto de Año Nuevo de Viena, que es contemplado a través de la televisión por millones de espectadores de todo el orbe y que nació en el siglo XX buscando el enlace con las sesiones musicales de la familia de los Strauss o de compañeros de viaje como Lachner y otros. El gran Clemens Krauss retomó la costumbre, que siguió, ya en los años cincuenta, el violinista Willy Boskovsky. Después, los más importantes maestros de la dirección se han subido a ese podio de la Filarmónica de Viena en la Musikverein. Este año hay una importante novedad: se sitúa ante la orquesta por primera vez en este concierto un director que ya lleva tiempo colocado entre los mejores, el berlinés Christian Thielemann, músico de aplastante solidez, wagneriano y straussiano (del Strauss bávaro). Su gesto amplio, no especialmente variado, su anclaje en el podio, sus concepciones bien asentadas en la tradición servirán de base para su actuación.La cita vienesa ofrece esta vez numerosas novedades en su tradicional repertorio, como las partituras de Ziehrer y Hellmesberger
Aunque ha dirigido a la Filarmónica en numerosas ocasiones, deberá confirmar si está en el secreto del rubato y de la fina elongación. Suponemos que encontrará fácilmente el camino para aplicar con fluidez los acentos y servir adecuadamente los ritmos balanceantes. Conocimientos tiene; y musicalidad, siempre evidenciada en su delicada reproducción de texturas y timbres. El concierto ofrece también mucho interés por el repertorio elegido, que incluye numerosas novedades, entre ellas partituras de compositores hoy poco recordados como Ziehrer o Hellmesberger. Atentos a la pantalla y al cedé que lanzará Sony.