La Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) ha sido readmitida como miembro de pleno derecho en la Confederación Internacional de Autores y Compositores (CISAC) tras haber llevado a cabo "las reformas solicitadas", informa la entidad española de gestión de derechos de autor en un comunicado. "De esta manera, la entidad finaliza su proceso de renovación institucional y completa, así, su adaptación a los ordenamientos jurídicos español y europeo", añade la nota.
En mayo de 2019, la organización mundial de sociedades de autores acordó la exclusión temporal de la SGAE hasta que la entidad española llevase a cabo una serie de reformas que la CISAC consideraba imprescindibles para garantizar el correcto funcionamiento del sistema de gestión colectiva.
Las reformas que han provocado la readmisión de la SGAE por parte de la CISAC son la ampliación del voto para todos sus socios, la creación de una comisión de supervisión y el traslado del poder ejecutivo a la dirección técnica. “En este periodo de actualización institucional, CISAC nos ha mostrado su plena colaboración para adaptarnos a las normas y estándares internacionales de la gestión colectiva. Es fundamental que a las entidades de gestión se nos exijan una serie de medidas cuyo objetivo sea el buen gobierno, la eficacia y las buenas prácticas”, ha destacado Antonio Onetti, presidente de la SGAE. “Esto ha sido posible gracias a la unión del colectivo autoral, a la suma de voluntades y a la participación de nuestros socios, además del esfuerzo llevado a cabo por el equipo técnico para poner al día esta institución. Ellos han sido los que han hecho posible el cambio. Con la vuelta a la CISAC y la aprobación de los estatutos por el Ministerio de Cultura, órganos que nos tutelan, hemos puesto los cimientos para contar con una entidad más democrática y plural. Ahora debemos seguir trabajando todos juntos para lograr una SGAE más eficiente”, ha concluido el presidente.
CISAC, que representa a 232 entidades de 121 países, desarrolla, monitoriza y exige el cumplimiento de las normas adoptadas voluntariamente por la comunidad de sociedades, como mejores prácticas vinculantes. Entre los requisitos que la CISAC demandaba a la SGAE, destacaban la aprobación de los estatutos de la entidad —en cumplimiento con la Ley de Propiedad Intelectual y la legislación europea—, la convocatoria de elecciones para renovar todos sus órganos de gobierno, y una serie de medidas relativas a una mayor eficacia en la trazabilidad, distribución y reparto de los derechos, entre otras. Medidas que ha ido adoptando la entidad desde el mes de abril de 2020 y que culminaron el pasado 30 de noviembre con el aval de sus socios en la asamblea extraordinaria.