El barítono Antonio Blancas, veterana voz ligada al género de la zarzuela y de la ópera, ha muerto este sábado a los 82 años. El Teatro de la Zarzuela ha destacado en su cuenta de Twitter su "intensa humanidad" y que en su voz "se concentra toda una época dorada de nuestra lírica".
Aunque nació en la capital española en 1939, siendo niño se marchó a vivir con su familia a Uruguay, y en Montevideo inició sus estudios musicales. En 1960 debutó en la capital del país suramericano en la ópera Don Giovanni de Mozart.
Blancas se casó con la soprano española Ángeles Gulín en 1963 y ambos se instalaron poco después en Europa. En 1965 ganó el Concurso de Canto de Múnich, lo que provocó el despegue de su carrera.
En Alemania la pareja tuvo a su hija, Ángeles Blancas, que siguió los pasos de sus progenitores y es también una soprano de reconocido prestigio.
Después de interpretar varios papeles de ópera en distintos teatros de Europa, Antonio Blancas debutó en el Teatro de la Zarzuela de Madrid en 1970 con Madama Butterfly. En los años siguientes interpretó y grabó varias zarzuelas como La Gran Vía, La del manojo de rosas, Pepita Jiménez o La zapaterita.
Desde 1983 fue profesor de la Escuela Superior de Canto de Madrid, donde también desempeñó el cargo de director.