Por primera vez desde que estalló el escándalo de acoso sexual en 2019, una cantante española ha denunciado a Plácido Domingo. No se sabe su nombre porque ha aparecido en el programa de televisión Salvados de espaldas y con la voz distorsionada, pero ha relatado prácticas muy similares a las que sacaron a luz sus compañeras en Estados Unidos, donde el telón de silencio que protegía al tenor se cayó. Esta mujer ha preferido permanecer en el anonimato, ha asegurado, por temor a represalias.

"Son figuras intocables, por eso yo estoy a oscuras", ha asegurado la cantante a Gonzo, el director del programa de La Sexta que este domingo ha emitido un reportaje que muestra el resultado de una investigación de más de año y medio sobre el artista español. "Es algo que no puedes contar, ¿a quién se lo cuentas? Él es Plácido Domingo y tú no eres nadie". Salvados asegura haber corroborado este hecho con otras dos fuentes.

La cantante ha acusado a Domingo de una serie de situaciones de presunto acoso cuando compartieron escenario en la década de los 2000. Ha señalado que él la besó en la boca en plena función en un escenario en España, en contra de su voluntad, al apagarse las luces durante una actuación, mientras que en otra ocasión le pidió meterle la mano en el bolsillo trasero del pantalón que ella llevaba, delante de testigos. "No sabía qué decir para no ofenderle y que se quedara tranquilo", ha reconocido. 

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Además, ha aprovechado la entrevista para realizar una petición. "Me gustaría que hubiera algún tipo de figura en los teatros que vigilara, a la que un cantante se pueda volver para pedir ayuda", ha indicado. Una medida que cree que es más que necesaria "porque estas cosas pasan a veces delante de todos". Estas declaraciones suponen el primer caso en el que una española se suma a las denuncias contra Domingo ya vertidas desde otros países.

El testimonio de esta mujer ha sido precedido por una entrevista con la mezzosoprano estadounidense Patricia Wulf, la primera intérprete que dio el paso de denunciar con nombres y apellidos a Domingo. "Era un secreto a voces", ha asegurado sobre situaciones como que el tenor, a quien ha definido "como un dios" en el mundo de la ópera y un "tocón", apareciera en su camerino a sabiendas de que ella se estaba vistiendo, le dirigiera insinuaciones o le llamara a horas intempestivas, además de hablar de su marido como su "rival".

El escándalo estalló en agosto de 2019 a raíz de una investigación publicada por la agencia Associated Press y que reunía las denuncias de una decena de profesionales de la ópera de Estados Unidos. Luego comenzaron a salir a la luz más testimonios procedentes de la Ópera de Los Ángeles, donde Domingo ostentaba el cargo de director, así como del sindicato estadounidense de artistas musicales AGMA.

Su exvicepresidente, el barítono Samuel Schulz, ha relatado en el programa un supuesto acuerdo de medio millón de dólares entre el cantante y el sindicato para no publicar una investigación que habría demostrado que 27 mujeres, durante 20 años, habían sido objeto de comportamiento inadecuado. Schulz decidió filtrar el informe a la prensa, motivo por el que, según ha asegurado, ya no tiene ningún puesto directivo en el sindicato ni recibe llamadas para actuar.

También ha participado en el programa la soprano uruguaya Luz del Alba Rubio, que ha denunciado haber sufrido algunas situaciones de acoso por parte del tenor español que llegaron a suponer que se le echara encima una noche cuando él la invitó a su apartamento a ver La Traviata. Por otro lado, ha confesado que llegó a pensar que era "el precio que tenía que pagar". Desde entonces, Rubio no cantó más en Washington o en Los Ángeles.

Sin embargo, ha indicado que llegó un momento en el que no pudo más. "No puedo dar un beso si no me nace, ¿mi canto, mi preparación no es suficiente, tengo que hacer esto para valer?", se ha preguntado. Un rechazo que ha aclarado que Plácido Domingo no llegó a tomarse bien. "Se puso muy mal, me dijo que podría haber hecho una bella carrera".

El programa, titulado Plácido, un secreto a voces, ha explicado al final que intentaron en varias ocasiones concertar una entrevista con Plácido Domingo pero ni él ni su entorno se molestaron en contestar. También recoge varios testimonios telefónicos de personas que han trabajo con el tenor sorprendidas por el silencio que ha habido en España para proteger al cantante. "Es escandaloso que no hayamos tomado cartas en el asunto, incluso de forma institucional", ha denunciado una de ellas.