Música

Óperas básicas

Verdi, discografía

24 enero, 2001 01:00

Giuseppe Sinopoli. DG 410 512-2. 1983

Consignamos en esta lista las obras verdianas que consideramos de mayor significación. A la hora de seleccionar las versiones atendemos a una imaginaria nota media, en la que entran sobre todo factores de índole artística, particularmente vocal.

Nabucco
Giuseppe Sinopoli. DG 410 512-2. 1983
Una eléctrica aunque algo altisonante dirección musical preside esta realización en la que encontramos a un Cappuccilli muy seguro, bien que de canto frecuentemente plano e impropiamente verista. Dimitrova está un poco forzada y fibrosa en el agudo, pero es fiera. Un recuerdo para la antigua interpretación de Callas de 1949 para Melodram, difícil de encontrar.

Ernani
Thomas Schippers. RCA GD 86503. 1967
Era mejor aún, con un Carlo Bergonzi y una Leontyne Price en estado de gracia y la misma flamígera batuta de Schippers, la versión en vivo del Met de 1962. Pero ésta, grabada en estudio, de sonido aceptable, no desmerece gran cosa. Curso de canto verdiano.

Macbeth
Claudio Abbado. DG 449732 -2. 1976
Magistral dirección de Abbado en esta "ópera experimental". Consigue, con extraordinaria delicadeza, que Cap- puccilli componga un personaje decoroso. A Verrett le falta metal pero plasma una Lady de muchos matices, con una buena escena del sonambulismo. En todo caso, la mejor Lady Macbeth ha sido Callas, a quien hallamos en la versión en vivo de La Scala de 1952 (EMI), de mal sonido, dirigida por De Sabata.

Rigoletto
Rafael Kubelik. DG 437704-2. 1963
Un sorprendente milagro de sonoridad romántica matizada hasta el extremo por la diáfana batuta de Rafael Kubelik. Dietrich Fischer-Dieskau no tiene ni el timbre ni la robustez propios de los italianos, pero hace una interpretación cuidadísima y sentida, atendiendo escrupulosamente la más mínima indicación de la partitura. Impecable Bergonzi, pese a no ser una voz mediterránea, y exquisita Renata Scotto. Estupendos los demás.

II trovatore
Zubin Mehta. RCA 74321 39504-2. 1969
Mehta obtiene una atmósfera sonora de tintes sombríos muy propios y los solistas están soberbios, en particular las dos damas, con voces sonoras y vibrantes y un adecuado estilo de canto. Milnes cumple sin problemas aunque su sentido del matiz y emisión sean discutibles, y el muy joven Plácido Domingo da prestancia a su Manrico, bien que no sobrado en la zona alta. A tener en cuenta el arrebatado Trovador salzburgués de Karajan de 1962, con Price y Franco Corelli.

La traviata
Franco Ghione. EMI 5 56330-2. 1958.
Pese al mediocre sonido y a la escasa calidad de los conjuntos y vulgaridad de la dirección, una grabación imprescindible por la verdad en carne viva de la interpretación de Callas, ya con la voz bastante averiada, y la frescura de acentos y calor del joven Kraus.


Simon Boccanegra
Claudio Abbado. DG 449752-2. 1977
Se interpreta la versión de 1881. Un registro en el que casi todo funciona a la perfección, dominado por la mano férrea de Abbado. Verdi en estado puro, con unas intervenciones vocales de gran calidad. Los mejores años de Mirella Freni, Cappuccilli (quizá su mejor intepretación para el disco) y José Carreras.

Un ballo in maschera
Erich Leinsdorf. RCA GD 86645. 1966
La dirección de Leinsdorf es tirando a anodina, sin especiales relieves, pero Bergonzi (el mejor tenor verdiano de la posguerra) y Leontyne Price son idóneos para sus difíciles partes. Los demás, a un nivel en todo caso aceptable. La versión de Solti, con Margaret Price y Luciano Pavarotti (Decca), es una buena opción. Nadie ha dirigido la obra como Toscanini (RCA, 1954), pero su reparto es muy inferior.

La forza del destino
Lamberto Gardelli. EMI 5 567124-2. 1969
Gardelli era un director linfático y sin personalidad. Sin embargo, sabe aglutinar a un excelente equipo de voces que ofrecen prestaciones muy resaltables. Bergonzi ya no está en su mejor momento y Martina Arroyo es más bien fría, pero con todo compensa. Mórbido y sensible el Padre Guardiano de Ruggero Raimondi. Mal en cambio Geraint Evans como Melitone.

Don Carlo
Georg Solti. Decca 421114-2. 1965
Es la versión italiana de 1884 con el añadido del acto I de Fontenaibleau. Impetuosa y contrastada dirección, soberanas prestaciones de Bergonzi, Dieskau y Nicolai Ghiaurov. Magnífica alternativa, de hecho al mismo nivel, es la interpretación de Carlo Maria Giulini con una espléndida Caballé y un fogoso Domingo (EMI, 1970).

Aida
Georg Solti. Decca 460765-2. 1961
Los conjuntos de la ópera de Roma no son nada del otro jueves, pero cumplen bajo la eficiente dirección de Solti. Price es la mejor Aida jamás grabada: lo tiene todo para dar una interpretación histórica: timbre, caudal, técnica, sentido del fraseo... Además, aquí no ha de salvar agilidades. La voz de Jon Vickers no es bella, pero matiza...

Otello
Arturo Toscanini. RCA GD 60302. 1947
Pocas discusiones caben respecto a la dirección de Toscanini, de una urgencia, un ceñido dramatismo y una concisión impares. Puede discutirse, sí, la calidad vocal de Ramón Vinay, muy esforzado, aunque sintoniza admirablemente con la batuta. Sutilísimo el Yago de Giuseppe Valdengo.

Falstaff
Arturo Toscanini. RCA GD 60251. 1950
El tempo de base, fundamental en Verdi y más en esta ópera de vejez, está marcado magistralmente en un juego rítmico admirable. Valdengo, aun con su debilidad en los graves, es un panzudo magnífico. Reparto coherente e imantado.

Misa de Réquiem
Victor de Sabata. EMI CD CHS 5 65506-2. 1954
(disco dedicado a De Sabata, que incluye fragmentos y oberturas de óperas de Verdi). Una de las muchas decenas de buenas versiones de la obra. ésta tiene una luz especial y una dirección soberbia y matizada, lo que se aprecia pese a la antigöedad de la toma. Elisabeth Schwarzkopf no está en su sitio, pero canta maravillosamente.