Sokolov actúa en Bilbao

El curso de la Sociedad Filarmónica de Bilbao, que empieza el 12 de octubre, se nos antoja uno de los más brillantes de los últimos tiempos al contar con artistas y conjuntos de primera magnitud.

Todo comienza con la presencia del polaco Krystian Zimerman, un pianista muy admirado en la localidad; y en todas partes, puesto que se trata de uno de los instrumentistas más serios y honrados del presente, dueño de un juego dinámico y fraseológico de extrema delicadeza y de una sonoridad muelle, cálida y efusiva. Claro que los colegas que lo acompañan en la temporada no desmerecen y su sola mención es la mejor demostración del aserto: Grigori Sokolov, adusto, hermético, concentrado, de un virtuosismo muy refinado (Bach, Chopin); Piotr Anderszewski, otro polaco, reciente revelación, elocuente, de muy modernas concepciones (Chopin, Szymanowski), y el nórdico Leif Ove Andsnes, equilibrado y magnífico constructor (Schumann, Mussorgski).

Hay que dedicar un apartado especial a la voz, que se encuentra magníficamente representada en esta edición por cantantes de pro, en plenitud de medios. Dos señoras de mucho tronío, en primer lugar. La una lituana, la actualmente soprano Violeta Urmana, de redonda emisión, homogénea vibración, amplitud de caudal y temperamento desbordante, que aborda canciones de Poulenc, Liszt, Rachmaninov y Strauss. La otra, austriaca, mezzo lírica, de tersa calidad tímbrica, Angelika Kirschlager, que se presenta con una piezas de Haydn, Grieg, Brahms, Poulenc, Debussy y Liszt; contará con la colaboración pianística del estupendo Helmut Deutsch. Un barítono en segundo lugar, el alemán Christian Gerhaher, figura muy reconocida por la finura de su dicción que, con su habitual pianista Gerold Huber, hace un monográfico Schumann, con el ciclo Amor de poeta. Este capítulo lo cierra el buen contratenor Carlos Mena, que actúa con el grupo Al Ayre Español de López Banzo.

Para concluir seleccionemos los nombres de tres estupendas agrupaciones: Les Musiciens du Louvre con Marc Minkowski al frente (Acis y Galatea de Haendel), La Petite Bande con Sigiswald Kuijken (Vivaldi y un intermezzo de Domenico Sarro) y la Orquesta de Cámara Orpheus, con la que interviene la cantora alemana Ute Lemper (Schulhoff, Milhaud, Weill).