El letón Andris Nelsons.
La Orquesta de la Ciudad de Birmingham, la del Maggio Musicale Fiorentino y la Filarmónica de Los Ángeles se reparten Madrid, Oviedo, Zaragoza y Valladolid.
Tres importantes directores de nuestro tiempo giran estos días por nuestro país. Uno de ellos es Zubin Mehta, veterano de mil batallas y artista cotizado donde los haya que visita con la Orquesta del Maggio Musicale Fiorentino Oviedo (día 25), Zaragoza (26) y Valladolid (27). En sus respectivos auditorios brinda una obra base de absoluta referencia, La consagración de la primavera de Stravinski, cuyo complejo entramado será resuelto por su implacable batuta. En las dos primeras citas añade la suite sinfónica Scheherazade de Rimski-Korsakov. En Valladolid se ocupa del Concierto n° 3 de Rachmaninov, con Denis Mantsuev como capaz solista.
El gran prodigio venezolano, Gustavo Dudamel, se presenta el domingo con la Filarmónica de Los Ángeles en el ciclo de Juventudes Musicales de Madrid, que será su única actuación en España. En los atriles, la Novena de Mahler, partitura que servirá para poner a prueba la madurez del eléctrico director.
No menos joven es el letón Andris Nelsons, que interviene en el ciclo Ibermúsica del Auditorio con su Orquesta de la Ciudad de Birmingham en dos sesiones (hoy y mañana) y con programas de repertorio: el ya citado Concierto para piano n° 3 de Rachmaninov, en este caso con otro virtuoso, el solista ruso Nikolai Lugansky, la Primera de Mahler, la obertura de Egmont de Beethoven, el Concierto para chelo n° 1 de Shostakovich y la Sinfonía del Nuevo Mundo de Dvorák. Será una buena ocasión para comprobar las muy comentadas excelencias de este músico, que este verano consiguió triunfar en el Festival de Bayreuth con Lohengrin.