Un momento de Eugene Onegin en el Palau de les Arts de Valencia. Foto: Stefan Okolowicz.

La ABAO, el Palau de les Arts, el Teatro Villamarta y el Teatro Campoamor estrenan óperas de Rossini, Tchaikovsky, Donizetti y Wagner esta semana.

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Cuatro óperas, en cuatro ciudades españolas y en el transcurso de una semana es un acontecimiento que hay que celebrar. La ABAO ofrece mañana (y hasta el 31 de enero), La italiana en Argel de Rossini en el Palacio Euskalduna de Bilbao. Daniela Barcellona no es contralto coloratura, pero sí una mezzo lírica que tiene la parte de Isabella bien ahormada. Michele Pertusi y el tenor ligero Antonino Siragusa la acompañan. Y el joven Michele Mariotti ubicado en el foso garantiza el éxito de esta nueva producción de Emilio Sagi.

Ladillo
En el Palau de les Arts de Valencia se estrena mañana Eugene Onegin de Tchaikovsky, un desaforado drama romántico. El aria de la carta de Tatiana es una secuencia maravillosa, y necesita una voz de soprano lírica de cierta anchura, justo la que controla la sudafricana Amanda Echalaz en esta producción del Teatro Wielki de Varsovia que dirige escénicamente Mariusz Trelinski. En el reparto figuran el tenor Dimitri Korchak, el bajo Günther Groissböck y el barítono Artur Rucinski. La batuta estará en las manos del pujante titular de la orquesta de la Comunidad Valenciana, Omer Meir Wellber, durante seis funciones hasta el 11 de febrero.

También mañana se ha programado en el Teatro Villamarta de Jerez una única función de la graciosa comedieta de Donizetti Don Pasquale, de la que se ocupa el burgalés Rubén Amoretti, antiguo tenor y reciclado en un bajo de agresivo metal. Otros tres españoles, María Rey-Joly, Enric Martínez-Castignani y Antonio Gandía contribuirán a dar buen tono al espectáculo, que dirige en lo escénico el fantasioso Curro Carreres. La batuta es de Gianluca Matinenghi, un joven discípulo de Renzetti.

Por último, Tristán e Isolda de Wagner estará en Oviedo los días 27 y 30 de enero en una discutible producción de Alfred Kirchner, que en este caso tiene como principales atractivos a Elisabete Matos, que aborda el cometido sin ser realmente una dramática, aunque sí una soprano musical. Guillermo García Calvo, un joven director madrileño elogiado en la Ópera de Viena, dirige un elenco en el que destacan Robert Dean Smith, Petra Lang, Felipe Bou y Gerd Grochowsky.