Pocos conjuntos de cámara en el mundo difunden la música de los países de habla hispana como el Cuarteto de cuerda Latinoamericano, entregado desde su fundación en 1982 a ese sano cometido. El CNDM anuncia una nueva visita, que enlaza con la de 2014, en las series 20/21 que se desarrollan en el Auditorio 400 del Museo Reina Sofía . Reúnen en esta actuación del próximo miércoles (15) partituras del brasileño Francisco Mignone (Cuarteto n° 2), el cubano Leo Brouwer (Cuarteto n° 3), el mexicano Mario Lavista (Cuarteto n° 5, ‘Siete invenciones') y el español Carlos Cruz de Castro (Cuarteto n° 6, encargo del CNDM), todos vivos menos el primero, que murió en 1986.



Lo más destacado es el estreno, que nos permitirá apreciar de nuevo una de las mentes más lógicas de nuestro panorama. Cruz de Castro es un creador muy personal dotado de una proverbial facilidad de comunicación. Sabe lo que quiere y cómo conseguirlo. Siempre se reconoce en él un lenguaje rectilíneo, dramático, directo, enérgico, aunque poblado de sutilezas. Desde su organizada mente y mediante pautas firmes, el músico madrileño, nacido en Canarias en 1941, es capaz de ordenar materiales, en principio sencillos, y construir un discurso en el que los ostinati rítmicos y los claroscuros ocupan lugar preponderante.