Claro que para que hayamos tenido esa sensación y no echemos de menos de manera absoluta la versión original de la obra, hay que desplegar toda una panoplia de efectos tímbricos, calidades instrumentales, claridad de ejecución, impulso y planificación. Los tempi parecen adecuados, como el impuesto a la marcha que vertebra el primer movimiento. El centelleo del segundo, los furibundos acentos del Scherzo (con un trompa sensacional: Maciej Baranowski), las volutas del Adagietto (aquí poco edulcorado) y los fugati del Finale están formidablemente reproducidos; aunque, como es lógico, falte carne, substancia y consistencia en el edificio.
Mahler: Sinfonía n° 5
Natalia Ensemble
17 marzo, 2017 01:00Claro que para que hayamos tenido esa sensación y no echemos de menos de manera absoluta la versión original de la obra, hay que desplegar toda una panoplia de efectos tímbricos, calidades instrumentales, claridad de ejecución, impulso y planificación. Los tempi parecen adecuados, como el impuesto a la marcha que vertebra el primer movimiento. El centelleo del segundo, los furibundos acentos del Scherzo (con un trompa sensacional: Maciej Baranowski), las volutas del Adagietto (aquí poco edulcorado) y los fugati del Finale están formidablemente reproducidos; aunque, como es lógico, falte carne, substancia y consistencia en el edificio.