“El retrato y el cuarteto comparten más analogías de las que cabría imaginar. Puede decirse que el primero es a la historia de la pintura lo que el segundo a la historia de la música, al menos a finales del siglo XVIII”. La equiparación lleva la firma de Miguel Ángel Marín, responsable de la programación musical de la Fundación Juan March. Será en su auditorio, este miércoles, donde demuestre que emparentarlos tiene sólido fundamento, en un concierto servido -vía streaming- por el Cuarteto Quiroga. El conjunto compuesto por Cibrán Sierra (violín), Aitor Hevia (violín), Josep Puchades (viola) y Helena Poggio (violonchelo) desplegará para documentarlo las dos grabaciones inéditas de su disco Heritage. A saber: el Cuarteto en Mi bemol Mayor G. 191 de Boccherini y el Cuarteto en Si bemol Mayor L.185 de Gaetano Brunetti.

Durante la ejecución del primero se proyectará la el cuadro La familia del infante Don Luis de Borbón, de Goya. Y durante el segundo, se hará lo propio con La familia de Carlos IV, también del pintor aragonés, que fue coetáneo de ambos compositores. Consta que a Boccherini incluso lo conoció personalmente, en Arenas de San Pedro (Ávila), donde estableció su pequeña corte el infante Luis de Borbón y Farnesio, mandado al exilio por su hermano, el rey Carlos III. Pero no se conocen los detalles del tipo de relación que pudieron mantener. “Si Goya -continua Marín- ya fue en vida considerado como el mejor retratista que tenía España, a Boccherini sus contemporáneos le atribuyeron nada menos que el mérito de haber gestado el cuarteto, junto a la aportación seminal del propio Haydn”.

Es muy probable que Goya también coincidiera con Brunetti, nombrado como su compositor de cámara por Carlos IV cuando este era Príncipe de Asturias. Goya fue asimismo compositor de cámara del mismo monarca así que desarrollaron en parte sus carreras bajo la misma ala protectora, de lo que cabe colegir su cercanía. Por este motivo, Marín escogió el mayestático retrato La familia de Carlos IV para ilustrar la interpretación del cuarteto de Brunetti, que escribió en total cincuenta, aunque se cree que en su corpus deberían figurar ocho más, hoy perdidos.

Detalle de 'La Tirana' (1794), retrato de Goya.

Tanto Marín como los integrantes del Quiroga lamentan que ambos compositores no hayan sido reivindicados en España -donde compusieron una amplísima parte de su obra- con una determinación a la altura de su legado. "Nuestro disco es una reivindicación y un acto de justicia", explica Sierra. "El repertorio cuartetístico de Haydn está internacionalmente asentado mientras que el de Boccherini, que escribió unos 90, de los que más de la mitad están sin grabar, es muy poco conocido". Una lamentable situación que, apunta Marín, tiene mucho que ver con el dominio de la musicología germana en el siglo XIX. Lo que no quita la dejadez institucional y cívica en nuestro país hacia ese patrimonio musical.

La sesión se cerrará con el Cuarteto en sol mayor op. 44, nº4, G 223, ‘La Tirana’. Este nombre obedece acaso a una doble inspiración. Por un lado, a la popular danza de la tirana y, por otro, a la actriz María del Rosario Fernández, apodada ‘La Tirana’. De nuevo, Boccherini y Goya convergen, ya que el genial retratista también la 'perfiló' en 1794. Lo que convierte a este retrato en una proyección pintiparada para acompañar al cuarteto. Además, la Fundación Juan March dedicará al cuadro una muestra específica a partir de julio.

@alberojeda77