Orquesta Nacional
La formación estatal centra su extensa programación sinfónica en tres grandes líneas temáticas. Primera: Schumann en perspectiva, en la que se podrán escuchar las cuatro sinfonías y los conciertos para piano y chelo. Segunda: El gran violinismo, que acogerá obras fundamentales del género firmadas por Sibelius, Brahms, Berg, Wieniawski (nº 2), Shostakovich y Britten. Y tercera: Rito y ritual, que será ilustrada por composiciones más o menos alusivas como la Sinfonía Resurrección de Mahler, el Te Deum de Bruckner, el Oratorio de Navidad (tres primeras cantatas) y la Misa en Si menor de Bach, el Festín de Baltasar de Walton, la cantata profana El delirio amoroso de Haendel, el Requiem de Brahms y, si se quiere, la ópera Salomé de Strauss. Muchas de ellas dirigidas por el titular, David Afkham. Hay variedad de batutas y algún muy interesante estreno mundial: Sánchez Verdú (Hacia la luz), Nuria Núñez Hierro (Unvollendete Wege), Elena Mendoza (Stilleben mit Orchester).
Orquesta Sinfónica de Barcelona y Nacional de Cataluña
Hay que resaltar los estrenos, mundiales o españoles, y la abundancia de grandes sinfonías. Entre aquellos debemos mencionar los de Bernat Vivancos (U), Raquel García Tomás (recordemos su ópera Je suis narcissiste), Enric Palomar (Tres amores oscuros para dos cantaores y dos pianos) y Jordi Cervellò. Se estrenan en España Corpo elettrico para violín y orquesta, combinación que también emplea Thomas Ades para su Märchentänze, que dirigirá él mismo, y Moment of Blossoming de Toshio Hosokawa. A sumar la suite de la ópera Lea de Benet Casablancas. Resaltemos por otro lado la programación de obras de talla como la Missa Solemnis de Beethoven, la Sinfonía nº 2 y la Canción de la tierra de Mahler), las Sinfonías 3 y 7 de Bruckner, la Sinfonía Lírica de Zemlinsky, La peste de Gerhard, Las iluminaciones de Britten (en el mismo programa). Quizá el panorama no sea excelso en cuanto a las batutas. Destaquemos las de Nuno Coelho, Kazushi Ono, Bringhier, De la Parra y Mena. Y la presencia de Pinchas Zukerman como
violinista y director en un programa con Mendelsshon como protagonista.
Sinfónica de Castilla y León
Esta formación no anuncia de momento más que lo tocante a su actividad del primer trimestre. Se estrena en España la Obertura en re mayor de la sueca Elfrida Andrée (1841-1929) y en el mundo la orquestación algunas canciones de Pauline Viardot a cargo del francés Marc Oliver Dupin. Chloé van Soeterstede estará en el podio en el primer caso y dirigirá también la Pastoral de Beethoven, y el ruso Vassily Sinaisky en el segundo, que incorporará la Tercera sinfonía de Saint-Saëns. El joven Jonathon Heyword, ganador del Concurso de Besançon, presenta Ciel d’hiver, de la siempre sorprendente Saariaho. Por su parte Giancarlo Guerrero dirigirá la versión orquestal de Lorin Maazel de la Tetralogía wagneriana. La temporada se abre con una sesión conmemorativa que llevará a buen puerto la diligente batuta de Pablo González dirigiendo el mismo programa con el que se presentó en público la orquesta hace 30 años: Obertura Leonora III de Beethoven, Concierto para dos pianos de Mozart (con los hermanos del Valle) y Segunda Sinfonía, Pequeña Rusia, de Chaikovski.
Euskadiko Orkestra
Se plantean una serie de conciertos de tipo monográfico. Aparecen centrados en Brahms (Brahms Fest), con sus conciertos y sinfonías en hábil alternancia al mando del titular, Roberto Treviño; Chaikovski, con sus Sinfonías 1 y 3, junto a Pascal Gaigne, que ha escrito dos obras nuevas para la ocasión, Urrutiko arimak y Urruneko azalak, que reflexionan sobre la pandemia, en conjunto que dirigirá Jaume Santonja; Shostakovich, en compañía de Ginastera, Britten y Glière (curiosa combinación), con Treviño al frente; Beethoven, acompañado de Bartók y Joël Mérah (con su nueva obra Jakinduriaren usaina, de su serie del Proyecto Elkano), que llevará adelante la directora Mei-Ann Chen; Bernstein, con sus Danzas de West Side Story y su Sinfonía nº 2, La edad de la ansiedad en combinación con el Concierto para orquesta del músico chinoestadounidense Zhou Tian…
Real Orquesta Sinfónica de Sevilla
Hay un claro dominio de lo francés, con Marc Soustrot como activo y nuevo titular, y con Michel Plasson como invitado especial. El primero pone sobre el atril entre otras partituras las cuatro sinfonías de Brahms, la 4ª de Mahler, Dafnis y Cloe de Ravel y la Sinfonía de Franck. El segundo cierra el ciclo nada menos que con una versión concertante de Diálogos de carmelitas de Poulenc. Se ha ideado, en abono aparte, una serie curiosa titulada Solistas y maestros en la que importantes instrumentistas se lucirán como tales y también como directores: Hardenberg, trompeta; Lindberg, trombón; Fromanger, flauta; Dindo, chelo (con tres obras nuevas en Sevilla); y Pérez Floristán, el flamante pianista sevillano (Conciertos 17 y 20 de Mozart). Obras de compositores españoles de hoy: Alén de Eduardo Soutullo (que aparece en otros cartelloni), Tres Pinturas velazqueñas de Torres, Miranda de Lobato Montoya (estreno absoluto). Apuntemos asimismo otros dos ciclos aparte en los que brilla el nombre de Schönberg: Las noches del Lope, con Soustrot haciendo la Noche transfigurada, y la ROSS in camera, con Óliver Díaz dirigiendo Pierrot lunaire.
Sinfónica de RTVE
Como la Nacional, la agrupación dependiente de la radiotelevisión pública organiza su temporada sobre tres grandes apartados: Belle Époque, que estudiará los movimientos musicales del periodo de entreguerras con París como eje antes de la Primera Guerra Mundial y Bizet, Debussy, Ravel, Saint-Saëns, Chausson, Dukas, Franck, Stravinski, Falla y Turina como protagonistas; Planeta Tierra, homenaje al poder evocador de la naturaleza desde La Creación de Haydn a la Canción de la tierra de Mahler; Brahms, que es aquí también, como en la ROSS, pieza clave representado por sus cuatro sinfonías. Un planteamiento que revela el buen olfato del director titular, Pablo González, que tan buena labor ha venido haciendo en su breve mandato y que, incomprensiblemente, por decisión superior, abandonará la orquesta al fin del presente curso. Hay programas muy bien estudiados, alguna obra nueva y batutas de interés. El ciclo concluye con la ópera Carmen de Bizet.
ORCAM
La programación diseñada por la nueva directora musical, la polaca Marzena Diakum, con la que hablamos al inicio de este recorrido, se basa en una serie de vectores entremezclados que reúnen una serie de ‘bes’ de la historia de la música: Bach (cantatas), Brahms, Bruckner (Motetes latinos), Berlioz, Bernstein y Berio, puntas de lanza en torno a las que se teje una panoplia dotada de coherencia. Un buen ejemplo es el concierto nº 2, que engloba el Requiem de Rautavaara (novedad), la Sinfonía nº 44, Fúnebre de Haydn, la Música Fúnebre de Lutoslawski y la Sinfonía nº 4, Trágica (aunque la obra tenga poco de esto), de Schubert. Anotemos los estrenos de El árbol rosa de Marisa Manchado, Cantata sobre fondo de Alborán de Ramón Paús y Ciudad arrebatada de Jorge Argüelles. La Joven Orquesta (JORCAM) dará dos conciertos dirigidos por Andrés Salado y Jaime Santonja. Y el Coro mantendrá una gran actividad, también en sesiones independientes.
Sinfónica de Tenerife
La temporada se habrá inaugurado con un peso pesado, Christian Zacharias en su doble faceta de pianista y director. En esta última la orquesta va a albergar en su seno a varias mujeres jóvenes que cada día pisan con más fuerza y seguridad en el podio. Citemos sus nombres, en algún caso no muy conocidos: Catherine Larse-Maguire (dos programas, el segundo muy bello y coherente: Cantus arcticus de Rautavaara, Concierto para flauta de Nielsen y Sinfonía nº 3 de Sibelius, tan poco frecuentada), Chloé van Soeterstède, a quien hemos citado al hablar de la Sinfónica de Castilla y León; Lina González-Granados y Tabita Berglund. Aplaudamos la programación por parte de Víctor Pablo Pérez de Las siete palabras de Cristo en la Cruz de Cesar Franck. Y el programa preparado por Edmond Colomer: Bernstein: La edad de la ansiedad (también en la Sinfónica de Euskadi, como vimos), con Albert Guinovart. Passacaglia de Webern y El mar de Debussy. Y un buen colofón: Javier Perianes dirigiendo y tocando el 9 de Mozart y el 3 de Beethoven.
Filarmónica de Gran Canaria
El titular, Karel Mark Chichon, se muestra muy activo y se aplica en obras de gran envergadura como la Novena de Beethoven y la Tercera de Mahler. De gran amplitud es también la Novena de Bruckner, que estará en las manos del veteranísimo Günther Herbig (89 años), director honorario. Hay una evidente inquietud en busca de obras poco frecuentadas y que la orquesta acomete por vez primera. Entre ellas: Concierto para percusión de Schwantner, Huapango de Moncayo, Concierto para bandoneón, Aconcagua, de Piazzolla, Obertura dramática (Alfred) de Dvorák, Requiem en Do menor de Cherubini, Concierto para violín de Weinberg, Sinfonía nº 1 de Kalinnikov, Cantos y revueltas de Pacho Flores (con este como solista), Divertimento en Si bemol de Busoni… Hermoso programa francés de Jean-Claude Casadeus, con Franck, Ravel, Dukas y Debussy.
Ibermúsica
La veterana entidad madrileña, creada y mantenida, no sin esfuerzos y luchas constantes, por la férrea voluntad del benemérito Alfonso Aijón, ahora a sus 90 años y en prudente retirada. Sus riendas están prácticamente en las manos de Llorens Caballero. Ibermúsica anuncia una programación en la que se sigue celebrando el medio siglo de existencia de la institución. Vendrán, como es habitual, grandes orquestas: Sinfónica Radio Berlín, Filarmónica de San Petersburgo, Staatskapelle de Berlín, Sinfónica de la
Radio de Viena, Philharmonia de Londres, Filarmónica de La Scala, Suisse Romande, Santa Cecilia de Roma… Con relevantes batutas: Jurowski, Temirkanov, Barenboim, Nott, Pappano, Chailly, Gimeno, Koopman… Muy poblado el capítulo violinístico. Bell, Benedetti, Fischer, Kavakos y la gran Anne-Sophie Mutter. Y chelistas de la talla de Yo-Yo Ma (suites de Bach), Soltani y Hakhnazar.
El piano, como siempre, está bien servido: Kissin, Abduraimov, Rana…
La Filarmónica
La enjuta y siempre interesante programación de esta promotora se basa en esta ocasión, como es habitual, en algunos relevantes nombres: Maria João Pires, (Teatro Real, Nocturnos de Chopin); Maurizio Pollini, en colaboración con la Fundación Scherzo y ya en el Auditorio Nacional (programa sin definir); Cuarteto Cosmos, joven y magnífico, con Haendel, Haydn, Arriaga y Shostakovich
(Quinteto con la pianista Varvara); el siempre esperado Valery Gergiev con su Orquesta del Mariinsky (Vida de héroe de Strauss); Forma Antiqva, con los hermanos Zapico al frente y la voz del contratenor Carlos Mena (cantatas de Bach), Sinfónica de Viena con el inquieto Andrés Orozco-Estrada (Beethoven). Dúo de pianos Argerich-Goerner (Debussy, Rachmaninov), Sinfónica de Düsseldorf con Adam Fischer y Andras Schiff (Emperador de Beethoven) y Sinfónica de Radio Suecia con Daniel Harding (2ª y 4ª de Brahms).
CNDM
Francisco Lorenzo, director de esta unidad del Inaem nos señala en su presentación que el curso pasado pudo salvarse pese a las enormes dificultades surgidas por la pandemia. Los números de la que ahora comienza no son tan espectaculares como los anunciados hace un año, pero no están nada mal: 274 citas —216 conciertos y 58 actividades educativas— en 29 ciudades españolas y 8 extranjeras; 48 estrenos absolutos, con 22 encargos del propio CNDM, más de la mitad firmados por compositoras. Y 54 obras del patrimonio musical histórico, estreno en tiempos modernos. Hay dos importantes músicos en calidad de residentes: la inquieta violinista y directora Lina Tur Bonet al frente de su grupo Musica Alchemica, y el compositor Mauricio Sotelo, fantasioso e imaginativo, de tan variado mundo sonoro. Se conmemorarán los ocho siglos del nacimiento del Rey Sabio con amplia dedicación a las Cantigas de Santa María. Por supuesto no faltarán ninguno de los apartados ya famosos de estas series de actividades, con el rico Universo Barroco en primer término (un Radamisto de Haendel y una Misa en Si menor de Bach como platos muy apetecibles). Y el Liceo e cámara, Fronteras, Lied, Órgano… Además de las coproducciones con otras instituciones y festivales.
Scherzo
Este ciclo anual organizado por la Fundación Scherzo ha podido desarrollar con cierta holgura, recuperada tras los peores meses de la pandemia, alguna de sus citas previstas, y así en meses pasados seguimos las actuaciones de Joaquín Achúcarro, Grigory Sokolov, Daniil Trifonov, Javier Perianes, Arcadi Volodos, Igor Levit y Christian Zacharias; a cual más interesante dentro de un muy alto nivel. Nos quedan en las próximas semanas algunos manjares apetitosos. Citemos algunos: la elegante y emotiva Elisabeth
Leonskaja (5 de octubre, con obras de Schubert, Widmann y Brahms); el veterano y vigoroso, alumbrador en su tiempo de tantas luces, Maurizio Pollini (20 de octubre, programa por determinar), y el fulgurante y afirmativo Seong-Jin Cho, primer premio en Varsovia en 2015 (10 de noviembre, Janácek, Ravel y Chopin). Recordemos también a los dos artistas que quedan del ciclo de
Jóvenes: Szymon Nehring (20 de septiembre, Szymanowski, Chopin, Scriabin y Prokofiev) y Milena Martínez (23 de noviembre, Schubert y Chopin).